Los extraños objetos captados por pilotos de la Marina de Estados Unidos
Los marinos detectaron su presencia casi a diario desde el verano de 2014 hasta marzo de 2015; "no sabemos quién está haciendo esto"
México
Pilotos de la Marina de Estados Unidos han sido testigos de fenómenos aéreos que nadie ha podido explicar. Videos captados en pleno vuelo han revelado objetos voladores no identificados (ovnis) viajando a velocidades hipersónicas, sin motores visibles o rastros de columnas de escape infrarrojas.
El Departamento de Defensa ha confirmado los extraños sucesos del cielo pero nunca ha afirmado que se trate de extraterrestres, mientras que los expertos señalan que pueden tener explicaciones más terrenales.
El periódico The New York Times entrevistó al teniente Ryan Graves y a otros 4 pilotos que vieron los ovnis entre 2014 y 2015 durante ejercicios de entrenamiento desde Virgina hasta Florida tras despegar del portaviones Theodore Roosevelt.
“Estas cosas estarían allí todo el día”, declaró. Graves ha reportado sus avistamientos al Pentágono y al Congreso.
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A finales de 2014 uno de ellos tuvo una colisión y presentó un informe oficial del accidente. Existen grabaciones que capturan cómo los objetos se acercan a las olas del océano mientras los pilotos no pueden creer lo que están registrando.
"Wow, ¿qué es eso?”; “¡míralo volar!”, puede escucharse en uno de los videos revelados.
La frecuencia de estos inexplicables encuentros ha obligado al Departamento de Defensa a crear un protocolo clasificado sobre cómo informar lo que los militares llaman fenómenos aéreos inexplicables.
Un portavoz de la Marina estadounidense, Joseph Gradisher, ha dicho: "Hubo una serie de informes diferentes”, pero en otros casos "no sabemos quién está haciendo esto, no tenemos suficientes datos para rastrearlo. Por lo tanto, la intención del mensaje a la flota es proporcionar una guía actualizada sobre los procedimientos de notificación de sospechas de intrusiones en nuestro espacio aéreo”.
Leon Golub, un investigador del Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics, dijo a The New York Times que "hay tantas otras posibilidades: errores en el código para los sistemas de imágenes y visualización, efectos atmosféricos y reflexiones, sobrecarga neurológica de múltiples entradas durante el vuelo de alta velocidad”. Y también desestimó causas extraterrestres, "es tan improbable que compita con muchas otras explicaciones de baja probabilidad pero más mundanas”.
Además de Graves, el periódico también entrevistó al teniente Danny Accoin. Los dos revelaron que descubrieron los objetos después de una actualización del radar.
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Estos avistamientos eran frecuentes a 30 mil pies, 20 mil pies e incluso a nivel del mar y los objetos podían acelerar, frenar, además de romper a velocidades hipersónicas. Siempre les pareció extraño a los marinos que hicieran paradas repentinas y giros instantáneos más allá de los límites físicos para un humano.
El teniente Accoin interactuó dos veces con los objetos. La primera vez, después de encontrar el objeto en su radar, configuró su avión para vincularse, volando mil pies por debajo de éste. Confesó que debería haber podido verlo con la cámara de su casco, pero no pudo, a pesar de que su radar le dijo que estaba allí.
Días más tarde, dijo que su cámara infrarroja también lo debió haber captado. "Sabía que lo tenía, sabía que no era un golpe falso”, pero a pesar de esto “no podía captarlo visualmente”.
Los aviadores llegaron a pensar que los objetos podrían ser parte de algún programa de drones extremadamente avanzado y clasificado; aunque, después de que un integrante del escuadrón estuvo muy cerca de chocar, el temor por su integridad aumentó y se convencieron de que no se trataba de ningún programa.
"Pasó de un programa de drones potencialmente clasificado a un problema de seguridad", dijo el teniente Graves. "Era una cuestión de tiempo antes de que alguien tuviera una colisión en el aire".
Como parte de la embestida de las fuerzas de Estados Unidos contra Estado Islámico en Irak y Siria el portaviones Theodore Roosevelt zarpó de la costa de Florida rumbo al Golfo Pérsico.
Después de los bombardeos en la región, los pilotos de la Marina dijeron que disminuyeron estos inexplicables encuentros.
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