¿Por qué la comida de Navidad o Año Nuevo sabe mejor en el “recalentado”?
Hay una explicación científica que aclara la razón por la cual la comida recalentada sabe más rica
La mayoría de los mexicanos aseguran que la comida sabe mejor en el "recalentado". / Marcos Elihu Castillo Ramirez
La cena de Navidad y Año Nuevo es uno de los menús más completos que las familias mexicanas preparan para celebrar las festividades de invierno, entre guisados como los romeritos, el bacalao y el pavo; entre ensaladas como la de manzana y la de Nochebuena; y guarniciones como pastas y purés, son platillos que se preparan en grandes cantidades para seguir degustándolos por varios días en el famoso “recalentado”.
Se le llama de esta manera a la reunión que se vuelve a tener con la familia al día siguiente de las cenas para volver a comer lo de la noche anterior. Lo que causa mucha curiosidad es que la mayoría de los mexicanos asegura que el sabor de la comida es mucho mejor en el recalentado, que el de la comida recién hecha.
Aunque esto parece un misterio, hay una razón científica para explicar por qué el sabor del recalentado es mucho mejor que el de la comida original y aquí te lo contamos.
La razón por la que el recalentado sabe más rico
Cuando no se termina la comida y la guardamos en el refrigerador, ocurren cambios químicos sutiles. Al almacenar los alimentos en la nevera ayudamos a conservar los platillos. Sin embargo, el proceso de descomposición es inevitable. De este modo, la acción de las enzimas y otras moléculas durante este proceso, se liberan compuestos aromáticos que al mismo tiempo intensifican el sabor.
Al congelar o enfriar y volver a calentar los platillos, las estructuras moleculares en los alimentos se reorganizan, se rompen las fibras de proteínas, haciendo que los sabores, especias y condimentos se integren de manera más uniforme, mejorando la experiencia del sabor.
Te puede interesar:
De acuerdo a información de Mayo Clinic, organización sin fines de lucro que ofrece atención médica, educación e investigación, las sobras de comida pueden permanecer en la nevera un máximo de 4 días, para evitar riesgos de intoxicación. Así que si quieres conservar por más tiempo el recalentado, será mejor la guardes en el congelador.
Por otro lado, la manera correcta de calentar el recalentado para evitar alguna infección, es haciéndolo hasta que alcance una temperatura interna de 74 °C.
