Llama Sandoval a acelerar desarrollo sostenible y cumplir agenda 2030
Al participar en la cumbre iberoamericana la titular de la DFP dijo que la pandemia no debe ser un obstáculo sino una oportunidad para “reajustarnos”
Al participar en la XIX Conferencia Iberoamericana de Ministras y Ministros de la Administración Pública y Reforma del Estado, denominada “Innovación para el desarrollo sostenible – Objetivo 2030, la Secretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval Ballesteros llamó a garantizar el desarrollo sostenible que los pueblos del mundo e Iberoamérica merecen y reclaman frente al reto del coronavirus”.
Ante sus homólogos de la región, propuso acelerar el paso para cumplir con el objetivo común de garantizar el desarrollo sostenible y redoblar los esfuerzos para mejorar las perspectivas de un futuro más justo para las generaciones venideras.
En conferencia virtual, se pronunció porque la pandemia de COVID-19 en el mundo “no sea un obstáculo al desarrollo, sino que nos permita reflexionar y actuar considerando esta nueva realidad, reajustando la política pública y fortaleciendo las instituciones con justicia y legalidad”.
“Y esperamos que la pandemia no sea un obstáculo al desarrollo sino que nos permita reflexionar y actuar considerando esta nueva realidad fortaleciendo y modernizando nuestras administraciones públicas y para que sigamos robusteciendo nuestras instituciones siempre cimentadas en la justicia la legalidad y la transparencia”, sentenció Sandoval Ballesteros.
La secretaria de la Función Pública formó parte del panel de la XIX Conferencia Iberoamericana junto con Rebeca Grynspan, secretaria general Iberoamericana, y autoridades de administración pública y gobiernos de la región.
En representación del gobierno de nuestro país destacó que, desde su inicio, México transforma los nervios centrales del Estado para erradicar la corrupción estructural que había impedido el desarrollo de la nación con la prevalencia del abuso de poder, tanto en el ámbito público como en el privado, la impunidad y la falta de participación ciudadana.
”En diciembre del 2018 México inició una transformación profunda de la vida pública, una transformación que trastocó los nervios centrales del Estado mexicano con el objetivo básico de erradicar males que habían impedido el desarrollo de nuestra nación destacadamente el objetivo fue acabar con la corrupción estructural la cual se origina por el abuso del poder tanto en ámbito público como en el privado o desde el ámbito privado la prevalencia de la impunidad y la falta de la participación cívica”, apuntó Sandoval Ballesteros.
Subrayó que el propósito es consolidar una administración pública que asegure un desarrollo sostenible al pueblo de México como lo marca la Agenda 2030, que con un carácter transfronterizo compromete a todos los gobiernos a alcanzarlo dentro de los próximos 10 años.
Puntualizó que, para ello, la Función Pública trabaja en la construcción de una administración sin simulaciones, a través de un marco normativo actualizado para una mayor eficacia en la prestación de los servicios públicos y en la capacidad de gestión, cerrando todos los espacios a la corrupción.
“Estamos acabando con las viejas prácticas de opacidad que prevalecían en administraciones pasadas, y un claro ejemplo es la extinción de los fideicomisos, que será fundamental para asegurar un manejo mucho más eficiente y transparente de los recursos públicos y generará cuantiosos ahorros que nos permitirán encaminarnos hacia una economía para el bienestar”, subrayó la secretaria Sandoval Ballesteros.
Afirmó que con medidas concretas como éstas se ha recuperado la confianza ciudadana, y así lo reflejan indicadores nacionales e internacionales como el Barómetro Global de la Corrupción 2019, de Transparencia Internacional, donde México aumentó en 37% la confianza de la población con respecto a su edición anterior; hoy, 61% de las y los mexicanos evalúa positivamente la estrategia anticorrupción.
Durante la reunión, México y el resto de países iberoamericanos adoptaron la Declaración de Andorra, que contiene los principales compromisos y logros alcanzados por los representantes iberoamericanos.
También se presentó y aprobó la Carta Iberoamericana de Innovación en la Administración Pública, que fue elaborada por el Centro Latinoamericano de Administración para el Desarrollo (CLAD) de manera conjunta con las autoridades designadas en cada país, y cuyo objetivo es señalar que las políticas públicas de los gobiernos deben estar alineadas con los objetivos del desarrollo sostenible y poner la tecnología y el conocimiento al servicio de la Agenda 2030.