¿Por qué hablamos como hablamos?
El “mande” estuvo presente en la Mesa W con la especialista en lenguaje Paulina Chavira y el historiador Alejandro Rosas
Mesa W: ¿Es correcto decir "Mande"?
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México
Sí, podemos cambiar, el “mande”, la sociedad es distinta, en la antigüedad, la sociedad mexica era muy educada, Cortés se lo tomó literal cuando le dijeron “esta es tu casa”, era muy comedida, hospitalaria, comparte el historiador, Alejandro Rosas quien afirma que Moctezuma no permitía que lo vieran a los ojos, cuando Cortés quiere abrazarlo fue un momento incómodo. "Las formas existen antes y después de la colonia, creo que es el momento de que estos términos desaparezcan y queden solo como referente histórico".
El “mande” está muy generalizado en América Latina, parece que solo fuera de México, pero no es así, señala la especialista en lenguaje, Paulina Chavira quien refirió “Minucias del lenguaje” de José Moreno de Alba, en el que señala que Pedro Enrique Sureña encontró esta forma cortés de dirigirse en respuesta a quienes hablan, como una forma de amabilidad, proveniente de las lenguas amerindias.
Y lo señala como el sometimiento a la autoridad de alguien más se instauró en la época colonial con los criollos cuando se tenía que decir “mande usted”.
"No tenemos concientizado esto del sometimiento, sino que eso nos enseñaron, sin reparar en la carga que contiene", la forma en que vamos cambiando el vocabulario siendo conscientes de lo que hablamos, dejemos de decir ‘mande’.
Alejandro señala que la “paz” en tiempos de Porfirio Díaz cuajó en la sociedad, cuando llegó el neoliberalismo como la “democracia” también cuajó, hoy ha triunfado en el discurso el tema de la “corrupción”.
Paulina Chavira no dice mande, cuenta que, aunque creció en esta línea, se cuestionó el ¿por qué?. La relación con sus hijos cambió esa forma, por lo que afirma, “yo si desterré el mande”. Aunque el ¿Qué pasó? Es impensable para algunas familias, pero los códigos y registros van cambiando, afirma.
El “mande” puede desaparecer, afirma Rosas, sin embargo, el grado de sumisión fue muy grande en otra época por lo cual hay muchas otras palabras que debemos erradicar como por ejemplo “patrón”.
No se falta el respeto a nadie si no se utiliza el “mande”, al final puede uno ser respetuoso con el “dígame” o “dime” señala Paulina, pues “es el momento para cambiar, afirma Rosas