Iglesia hace un llamado a sanar "una sociedad lastimada por la violencia"
Foto de archivo
Bajo el lema “Peregrinos de Esperanza”, la Arquidiócesis Primada de México hizo un llamado para trabajar para una sociedad lastimada por las heridas de la violencia, la depresión, la marginación y múltiples realidades que viven los mexicanos.
En su editorial “Desde la Fe”, pide a todos los actores sociales, gobierno, empresarios, ciudadanos, académicos, comunidades religiosas, personas que creen y las que no creen en Dios, a construir en este 2025 un año de esperanza, que México lo necesita y se lo merece.
En el texto, la Iglesia Católica insistió en la necesidad de brindar una esperanza que no defraude, que no esté basada en falsas promesas, en el ataque al que piensa diferente, al que es considerada competencia, o que esté cimentada en la corrupción o el crecimiento individual.
Ante ello enfatiza que se pronuncia porque callen las armas, que se acaben las divisiones y seamos artesanos de la paz y constructores de esperanza.
La Arquidiócesis indica que más allá del histórico rito que encabezará el Arzobispo Primado de México, el cardenal Carlos Aguilar Retes, con el inicio de “Año Santo”, con la apertura de las puertas catedralicias, es importante recordar que el corazón de Jesús siempre está abierto para todos, los que se sienten solos, los que piensan que ya no tienen perdón, los que han obrado mal, los que buscan consuelo, quienes han sufrido violencia, quienes buscan con desesperación a un ser querido, para los migrantes, para los corazones cerrados, para niños, jóvenes, adultos y ancianos.
Puntualiza que es para estas personas el Jubileo, que se presenta como un tiempo para abrir los corazones a la esperanza, a una esperanza que no defrauda, “pues viene de Dios mismo”.
Ante ello, indica que los cristianos tienen el deber de compartir esa esperanza, algo que se logra cuando se mira a todos los que necesitan de nuestra cercanía y compasión.
La Iglesia Católica, explicó que el año Jubilar comienza a principios del 2025, fecha en la que se suele hacer una lista de propósitos para renovarnos en el año que inicia, para ser mejores y alcanzar nuevas metas.
Reiteró el llamado de aprovechar las puertas a la esperanza que dijo, “abre el Año Jubilar” para dar respuesta a preguntas como ¿Qué tipo de Año Nuevo queremos?, ¿cómo nos imaginamos 2025?, ¿qué cambiaremos individualmente para contribuir a un cambio colectivo? Depositando los temores y miedos en Jesús, y dejar que sea “Él quien nos guíe a un nuevo camino”.
