Reitera Corte que PEMEX no es responsable en daños por 'huachicoleros'

México

La Suprema Corte de Justicia de la Nación consideró que no puede atribuirse a Petróleos Mexicanos (PEMEX) los daños ocasionados en materia ambiental vinculados a la ordeña ilegal de ductos cuando la responsabilidad en materia de seguridad corresponde al Estado Mexicano.

Los ministros de este alto Tribunal decidieron amparar a PEMEX contra la resolución de la Sala Especializada en Materia Ambiental y de Regulación del entonces Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa para la reparación del daño por un derrame de hidrocarburo ocurrido en el municipio de Silao, Guanajuato, en 2014.

Así explicó la secretaria de acuerdos en la Segunda Sala de la Corte la determinación de los ministros, misma que obtuvo una mayoría de 3 votos, respecto a que, cuando no exista un responsable a quien atribuir directamente las afectaciones generadas por la actividad de los 'huachicoleros', correspondería a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) asumir el costo de las acciones de remediación.

"Amparo directo 9/2017. Se propone, único, la justicia de la unión ampara y protege a Pemex Refinación contra la autoridad y el acto reclamado cuestión del resultado primero de esta sentencia para los efectos señalados en el último considerando de la misma".

Fue la delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) en el estado de Guanajuato la que estableció la reparación del daño ambiental que debería atender PEMEX, misma que rechazaron los ministros conforme al proyecto de Alberto Pérez Dayán.

Uno de los argumentos torales de este fallo, en línea con otros resueltos en sentido similar, es que no se puede pretender que la empresa petrolera sea responsable de afectaciones por tomas clandestinas cuando es un delito provocado por terceros y la seguridad pública es materia que corresponde atender a la Federación, las Entidades Federativas y los Municipios.

Según el documento, en 2014 la extracción ilegal de hidrocarburos en los ductos de PEMEX alcanzó máximos históricos, con un promedio de 4 mil 219 tomas clandestinas detectadas en todo el país y un robo de combustible de cuatro punto dos millones de litros en promedio por día.

Con sustento en el precio de la gasolina vigente en 2014, de $12.89 el litro, se estima que las pérdidas diarias alcanzaban $54.6 millones de pesos, esto sin considerar la reparación de los daños causados a la infraestructura por este crimen.