Pernoctan maestros de la CNTE entre aguaceros, hambre y falta de baños

Por Laura Alanis VillafuerteMéxico.- Más allá de las múltiples afectaciones que ha provocado su presencia en la Ciudad de México, poco se conoce sobre la serie de situaciones que deben enfrentar diariamente los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), al acampar en plena calle. La maestra oaxaqueña Itandehui Gaytán, por ejemplo relata su experiencia en relación a los aguaceros que ha padecido al interior de una casa de campaña:"Pues la lluvia en el campamento. Nos inundamos, tenemos que sacar el agua, se mojan nuestras cosas"Itandehui Gaytán, maestra de 25 años, quien comenta extrañar profundamente a su beba que dejó en Oaxaca, también habla sobre el hambre y la sed que aquí en la capital ha padecido:"El hambre de estar bloqueando las calles para que nos den una respuesta. Nos tenemos que aguantar el hambre, la sed. A veces no tenemos dinero suficiente para comprarnos una botella de agua"

La maestra de la CNTE, Angélica García, por su parte, comenta que ella y varias de sus paisanas oaxaqueñas, acampan desde hace dos semanas sobre la calle 5 de mayo en el primer cuadro de la ciudad. Considera que entre la lluvia y el frío nocturno, resulta imposible conciliar el sueño:"Pues prácticamente no dormimos, nos la pasamos dormitando que es otra cosa muy diferente. Porque dormir, dormir, es otra cosa, relajarte, disfrutar del sueño. En esta situación ni siquiera eso"

Pero no todos los de la CNTE cuentan con casas de campaña, como algunos legisladores aseguran, tal es el caso de la maestra Domitila Hernández, quien se guarece a través de lonas que coloca a manera de techo. Pero aguantar el clima, dice, no es tan complicado como enfrentar el hambre

"Estamos aguantándonos con la comida que nosotros trajimos de Oaxaca. Tostadas, chapulines, lo poco que pudimos traer, y con eso estamos sobreviviendo acá"

Otra de las docentes de la CNTE que pernotan en la plancha del Zócalo, comentó ser originaria de la región indígena de La Cañada, en Oaxaca. Ella consideró que ir al baño y asearse diariamente son dos de las necesidades más complicadas para los maestros:"En los establecimientos, en los estacionamientos públicos, en las tiendas comerciales, que también están haciendo su agosto con nuestra presencia aquí y algunos nos niegan el servicio, algunos comercios. -Cuántos les cobran por entrar al baño ?. -5 pesos, y una migaja de papel. Eso que dicen que sucios, que las calles ya están así, no, yo no he visto a maestra o maestro haciéndose en la calle"

En el marco de la aprobación de la Ley del Servicio Profesional Docente, se calcula que alrededor de 20 mil maestros de la CNTE, provenientes de distintas entidades del país, arribaron desde hace tres semanas a la Ciudad de México, y pernoctan en inmediaciones al primero cuadro de la ciudad.