Afectan elecciones testosterona de votantes

Por Kristina VelfuMéxico.- A todo esto de los procesos electorales, científicos se han dado a la tarea de investigar cómo funciona nuestro cerebro cuando de votar se trata y algunas curiosas reacciones fisiológicas post-elección. Pensamos que nuestra decisión de otorgarle un voto un candidato en una elección política es el resultado de un proceso razonado, minucioso, en el que sopesamos una serie de factores, propuestas, personalidad e ideología

Se cree, entonces que solamente las personas radicales o ignorantes toman decisiones irracionales, víctimas de la manipulación emocional. Y, claro, nosotros no somos esas personas, nosotros ejercemos control de nuestro cerebro

Pero, qué tan cierto es esto. Estudios muy serios sobre comunicación política y química del cerebro concluyen que las emociones, aparentemente más primitivas, tienen mucho que ver en nuestra decisión final. Así mismo hay personas que con ciertos hábitos que son mucho más participativas que otras, por lo que las campañas se enfocan más en ellas. Esta línea de investigación bautizada como Neuropolítica, ha arrojado luces sobre este tema. Por ejemplo los electores con una afiliación política marcada difícilmente cambian de opinión, saben lo que creen. Un factor, no relacionado con propuestas y partidos, que influye mucho, según científicos Universidad Tecnológica de Texas, es que el candidato sea físicamente corpulento. Pues nuestro cerebro le asocia con "la supervivencia y la protección"

¿Será que si?Otra cosa es el nivel de satisfacción con la propia vida. Resulta que quienes están más contentos consigo mismos son personas más participativas en unas elecciones políticas por lo que acuden a votar. Las personas insatisfechas, de acuerdo a un estudio de la Universidad de Baylor, prefiere abstenerse. Eso queda demostrado con que países con alto nivel de vida son países más participativos en su vida política

Lo que se convierte en un círculo vicioso. Si estas descontento y no participas, bueno, tampoco estás haciendo nada porque la situación mejore. Pues no sólo los satisfechos son participativos, también los deportistas. Las personas que realizan más actividad física y cuidan su salud tienden a involucrarse más en los procesos políticos que quienes son más sedentarios. Los investigadores dicen que por eso algunas campañas aprovechan espacios deportivos para pedir el voto

Por último, los niveles de testosterona masculina, cambian de acuerdo a los resultados. Los votantes que ejercieron su sufragio por el que resultó ganador mantienen niveles estables de testosterona, mientras que los partidarios de los perdedores del sufragio sufren una caída sus niveles según revela un estudio de la Universidad de Duke y la Universidad de Michigan, en Estados Unidos. Este descenso de la hormona masculina por excelencia es especialmente pronunciado 40 minutos después de que se conozcan los resultados. La testosterona es una hormona esteroidea ligada a la agresividad, a la capacidad de asumir riesgo y a la respuesta ante las amenazas. Las mujeres también la producen en menor cantidad lo que las hace menos sensibles a experimentar cambios rápidos en la testosterona tras una victoria o una derrota.