"El Islam no es responsable", dicen en la mezquita del agresor de Fort
Varias personas conocían, a veces solo de vista, a Nidal Malik Hasan, de 39 años, que iba a orar regularmente los viernes
Estados Unidos.- Los fieles de una mezquita de los suburbios de Washington estaban en estado shock el viernes tras enterarse de que uno de los suyos era el autor de los disparos de la víspera en Texas, mientras escuchaban ese día de plegaria al imán afirmando que "el Islam no es responsable"
"Presentamos nuestras condolencias y nuestras oraciones a las familias de las víctimas (...). El Islam no es responsable", declaró Mohamed Abdullahi, imán del centro comunitario musulmán de Silver Spring (Maryland, este), ante centenares de fieles reunidos para la oración semanal
Ante las cámaras de televisión en ese centro, que incluye una mezquita, una clínica y servicios culturales y sociales, los fieles no podían ocultar su sorpresa al día siguiente del incidente en la base militar de Fort Hood, que según el último balance dejó 13 muertos y 28 heridos
"Estoy verdaderamente conmovido. El Islam no le pide a nadie que haga una cosa parecida", insistía Cheij Khamis, uno de los fieles
Varias personas conocían, a veces solo de vista, a Nidal Malik Hasan, de 39 años, que venía a orar regularmente los viernes hasta hace pocos meses, cuando fue destinado a la base de Fort Hood, al sur del país. El imam Abdullahi afirma que lo vio por última vez en junio
"Era un hombre muy apacible, muy calmo. Sólo venía a orar los viernes", indicó otro fiel, Akhtar Khan, que frecuenta el centro desde hace 25 años
"Es muy triste. Es una tragedia para todos. Espero que se ore por todos, por todos los estadounidenses y no solamente por los musulmanes", afirmó Ibrahim Gayi, antes de ingresar en la mezquita para rezar acompañado de su esposa senegalesa
"Nadie sabe lo que hay detrás de esto. Debe ser un problema mental. Usted sabe que estos muchachos que van o vuelven de la guerra tienen necesidad de ayuda" agregó, intentando encontrar explicaciones a lo ocurrido
Las autoridades no adelantaron hipótesis sobre el móvil del hecho, aunque un primo del agresor afirmó que se sentía hostigado en el ejército por tener orígenes en Medio Oriente
"Cuando lo ví por televisión, lo reconocí de inmediato y mis ojos no podían creer lo que veían", afirmó Asif Qadri, responsable de la clínica del centro musulmán
"Era muy sociable y afable. Lo veía casi todas las semanas. La última vez debe de haber sido hace seis meses o un año", indicó. "Era un buen practicante musulmán"
"Mantuvimos conversaciones ordinarias. Tenía aspecto de maduro y responsable, un caballero. Nunca manifestó opiniones radicales en un sentido u otro. No podía creer que se tratara de la misma persona", agregó
Mientras, el presidente del directorio del centro musulmán, Arshad Kurishi, señaló: "Estamos bajo el shock de la noticia y profundamente entristecidos"
"Todo el mundo sabe que somos un lugar de buena reputación. Aquí no estimulamos ese tipo de comportamientos. No recibimos fanáticos", agregó.



