El enemigo interior: Angustia vs ansiedad
Para todos los que no saben si lo que tienen es miedo, angustia, ansiedad, o qué les pasa
Ciudad de México
Cristián Molina, psiquiatra. Asesor del Programa Nacional de Prevención de Suicidio.
Sobre la ansiedad
La ansiedad y la preocupación son parte de la vida. PEEEERO, cuando se está preocupado todo el tiempo, pensando que lo peor va a suceder, hay pánico o ataques de ansiedad y hasta evitas hacer cosas que tienes que hacer (como pagar las deudas aun cuando tienes el dinero), entonces puedes tener un problema de ansiedad.
¿Has tenido pensamiento como?:
“Algo malo me va a ocurrir”
“Me va a dar un ataque cardiaco”
“Nadie me puede ayudar”
“No puedo manejarlo”
¿Qué onda con la angustia?
La angustia se constituye como un miedo a algo futuro, miedo a que pase algo, que paraliza a la persona. Por su parte la ansiedad, es un temor a algo actual, aunque no se concrete exactamente a qué. Genera una aceleración vital en la persona.
El angustiado se muestra deprimido, renuncia a luchar, a diferencia del que siente ansiedad que está activado. La angustia no es nunca útil, afecta debilitando el sistema inmunitario y generando efectos psicosomáticos, Tan solo el cambio en la sensación de condena e indefensión puede guiar a la persona a vivir fuera de la percepción de pesadumbre e incapacidad. Nunca hay que perder de vista que “solo quien tira la toalla se da realmente por vencido”.
¿Qué pasa en tu cuerpo cuando sientes ansiedad?
¿Cuáles son los tipos de trastornos de ansiedad?
Trastorno de ansiedad generalizada: Hay preocupación por problemas comunes como la salud, el dinero, el trabajo y la familia. Pero las preocupaciones son excesivas y las tienen casi todos los días durante al menos 6 meses
Trastorno de pánico: Estos son repentinos y repetidos momentos de miedo intenso sin haber un peligro aparente. Los ataques se producen rápidamente y pueden durar varios minutos o más
Fobias: Las personas con fobias tienen un miedo intenso a algo que representa poco o ningún peligro real. Su miedo puede ser por arañas, volar, ir a lugares concurridos o estar en situaciones sociales (conocida como ansiedad social)
Causas de la ansiedad
Algunos heredan de su familia una tendencia a ser más ansiosos que otros.
El cuerpo de algunas personas tiene una tendencia a reaccionar más rápido o con mayor intensidad que otras frente a una situación que percibe como peligrosa.
Experiencias negativas en la vida a veces hacen que la persona concluya que no tiene ningún control sobre su vida.
Vivir eventos estresantes también puede ser la causa de la ansiedad.
¿Cuándo pedir ayudar?
Los manuales de manejo psiquiátricos son claros al indicar tres situaciones que ameritan ir a evaluación y a someterse a la terapéutica adecuada:
Un ataque tan fuerte que incapacite a la persona.
Contar con tres ataques en una semana, o de forma más espaciada.
Tres ataques en un mes.
¿Cómo podemos ayudar?
Siempre guardar la calma frente a alguien que la sufre, decimos más con nuestro lenguaje no verbal que con nuestras palabras, dos ansiosos no se pueden ayudar.
Acompañar a la persona, hacerle sentir que todo se va a resolver, no decir cosas como “no pasa nada, todo está en tu mente”. Se trata de dar contención.
Si la ansiedad se la está desencadenando un factor externo y, evidentemente, la persona no le encuentra una solución, ya que su mente se encuentra nublada, enfocarnos en las situaciones más urgentes y apremiantes, priorizarlas y ayudarle en nuestra medida a solucionar lo que sí se puede.
Tratamiento
Tanto los medicamentos como la psicoterapia han demostrado ser efectivos. De hecho, la terapia cognitiva, que es la que presentamos en este programa, es uno de los tratamientos más efectivos para combatir la ansiedad.