Parkinson: tratamientos, síntomas y más con Martha Debayle
Nuestros especialistas despejan todas tus dudas sobre esta enfermedad
Parkinson: tratamientos, síntomas y más con Martha Debayle
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://wradio.com.mx/embed/audio/557/1955686/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
México.- Este jueves con Marhta Debayle, el doctor Edilberto Peña de León (FB:Vive sin Depresión informes@incide-mexico.com @vivesindepre) y la doctora Laura Ordoñez Boschetti, nos hablaron del Parkinson. Conoce cómo se detecta, los tratamientos que hay para tratarlo y cúales son los factores asociados a este trastorno con nuestros especialistas.
- Es el segundo trastorno neurodegenerativo más frecuente por detrás de la enfermedad de Alzheimer y se estima que, debido al envejecimiento de la población, su prevalencia en los países más poblados del mundo se duplicará en los próximos 25 años. - Se estima que 6,3 millones de personas padecen Parkinson en todo el mundo.
- 500 mil personas en México padecen este mal. De acuerdo con la información estadística más reciente, al año surgen 44 nuevos casos por cada 100 mil habitantes
- La enfermedad raramente debuta clínicamente antes de los 50 años, sin embargo hasta en un 5% de los pacientes de países occidentales y un 10% en Japón, se manifiesta antes de los 40, siendo considerados pacientes “de inicio joven”.
Pero ¿Qué es el parkinson?
Trastorno que afecta las células nerviosas, o neuronas, en una parte del cerebro que controla los movimientos musculares.
En la enfermedad de Parkinson, las neuronas que producen una sustancia química llamada dopamina mueren o no funcionan adecuadamente.
Normalmente, la dopamina envía señales que ayudan a coordinar sus movimientos. Nadie conoce el origen del daño de estas células. Los síntomas de la enfermedad de Parkinson pueden incluir:
- Temblor en las manos, los brazos, las piernas, la mandíbula y la cara
- Rigidez en los brazos, las piernas y el tronco
- Lentitud de los movimientos
- Problemas de equilibrio y coordinación
A medida que los síntomas empeoran, las personas con la enfermedad pueden tener dificultades para caminar o hacer labores simples. También pueden tener problemas como depresión, trastornos del sueño o dificultades para masticar, tragar o hablar.
Factores asociados
Intrínsecos:
- El envejecimiento es el principal factor de riesgo de padecer la enfermedad y su incidencia y prevalencia aumentan exponencialmente más allá de la sexta década, pasando a ser la última de hasta un 2% en mayores de 65 años.
- Por esta razón es más frecuente en países con mayor esperanza de vida.
- Según distintos estudios los hombres tienen mayor riesgo de padecerla que las mujeres siendo la prevalencia ligeramente mayor y la incidencia considerablemente más grande.
- Sin embargo otros no encuentran diferencias significativas. No se conoce con certeza la causa de esta supuesta diferencia de género pero se sugiere que podría estar en relación a un efecto protector de los estrógenos sobre las neuronas dopaminérgicas
- Aparte de la edad, la historia familiar es el mayor predictor de riesgo de padecer EP
Ambientales:
- El papel del entorno y sus posibles toxinas en el desarrollo de la EP ha sido recurrente motivo de estudio.
1. Vivir en una área rural y trabajar en el campo han sido frecuentemente asociados a un mayor riesgo de padecer la enfermedad debido a la exposición de agua de pozo y contacto con pesticidas.
2. Sin embargo otros estudios han mostrado resultados cuestionables o incluso han asociado el riesgo de EP a la vida en zonas urbanas. No se ha podido demostrar relación entre otras ocupaciones y la EP.
3. Algunos estudios caso-control o reportes aislados sugieren la exposición a materiales pesados como factor de riesgo de padecer Parkinson, pero la asociación no es concluyente.
4. Los estudios que evalúan la dieta como factor de predisposición a sufrir la EP son en general poco convincentes.
5. Algunos autores han relacionado el consumo de lácticos con el aumento de riesgo.
6. Por el contrario la cafeína y el café podrían tener un efecto protector, al igual que el consumo de alcohol. Son necesarios más estudios para esclarecer la cuestión pero su diseño es dificultoso.
7. Existen datos consistentes para considerar el consumo de tabaco factor protector ante la enfermedad.
8. Se desconoce el mecanismo de esta asociación y la hipótesis más aceptada es el posible efecto de la nicotina sobre la oxidación celular o el enzima mono-amino oxidasa B.
9. De todos modos no todos los estudios han podido confirmar este efecto y algunos lo restringen a pacientes relativamente jóvenes.
10. También ha sido descrita la asociación entre trauma cráneo-encefálico y el riesgo de padecer Parkinson en edades avanzadas
11. Establecer el papel de los factores ambientales en la etiopatogenia de la EP resulta difícil. Como idea general, lo más probable es que múltiples factores del entorno actúen de forma sinérgica en pacientes genéticamente predispuestos.
Diagnóstico de la enfermedad de Parkinson
- La EP es una enfermedad de diagnóstico clínico. Esto significa que es el neurológo quien, con los datos aportados por el paciente y su familia en la anamnesis y los hallazgos de la exploración física, diagnostica la existencia de una EP
- No es estrictamente necesaria la realización de pruebas complementarias (análisis de sangre, resonancia magnética o PET -estudio que permite conocer el estado de la función dopaminergica cerebral-).
- Si bien en determinados pacientes puede ayudar a aumentar la certeza diagnóstica y diferenciar la enfermedad de Parkinson de otros procesos que comparten características clínicas comunes.
- La realización de un PET cerebral puede ayudar en aquellos pacientes con características atípicas en los que el diagnóstico resulta más difícil. - No es una prueba de rutina ni disponible en todos los centros.
Tratamiento de la enfermedad de Parkinson
- El tratamiento fundamental es la reposición de dopamina cerebral mediante la administración farmacológica de su precursor (levodopa).
- En los casos en los que las medidas farmacológicas no consiguen controlar los problemas del paciente, el tratamiento quirúrgico mediante lesión o estimulación de estructuras cerebrales malfuncionantes en la EP, tales como el núcleo subtalámico o el globo pálido interno, es otra posibilidad terapéutica con buenos resultados en series amplias de pacientes con años de seguimiento.
- La utilización de transplantes celulares se encuentra todavía en fase de experimentación en modelos animales.
Movimientos anormales más notorios.
- Citas médicas más frecuentes que en la etapa inicial.
- Puede necesitar atención especializada.
- Otros tratamientos como: terapia física y del lenguaje, cirugía en algunos casos.
Etapa avanzada
Movimientos anormales mucho más marcados que pueden conducir a caídas.
Complicaciones no relacionadas con los movi-mientos del cuerpo como dificultad para pasar los alimentos y estreñimiento.
- Puede necesitar hospitalización y la atención de otros médicos especialistas (urólogo, gastroenterólogo, ortopedista, psiquiatra), enfermeras especializadas y trabajadores sociales.
- Puede requerirse cirugía como tratamiento de la enfermedad de Parkinson.
Etapa terminal
El paciente necesita de mayor apoyo, ya que generalmente se encuentra en cama y alimentado a través de sonda.
Puede requerir internamiento en una institución para un cuidado especializado.