Entra en vigor la prohibición de venta de comida chatarra en todas las escuelas del país
La disposición forma parte del programa gubernamental “Vida Saludable”

A partir de este sábado 29 de marzo entró en vigor la prohibición de venta de comida chatarra en todas las escuelas del país, que forma parte integral del eje articulador “Vida Saludable” establecido en la Nueva Escuela Mexicana (NEM).
Esta nueva disposición establece que quedará prohibido vender o promocionar alimentos ultra procesados con altos contenidos de azúcar, grasas saturadas, grasas trans y sodio en las cooperativas y tiendas escolares, lo cual contempla refrescos, frituras, dulces, chocolates, pastelitos y otros productos similares identificados con sellos de advertencia.
TE PUEDE INTERESAR:
El propósito primordial del programa es combatir los altos índices de obesidad infantil y juvenil que existen en México, en el que nuestro país ocupa uno de los primeros lugares a nivel mundial.
Según los datos de la última Encuesta Nacional de Salud y Nutrición del (INEGI), el 37 por ciento de los niños y niñas de entre 5 y 11 años presentan obesidad.
Mediante un comunicado, la Secretaría de Educación Pública (SEP) exhortó a maestras y maestros para informar sobre la prohibición de venta de comida chatarra en los planteles escolares.
Durante la mañanera presidencial del pasado miércoles, el titular de la SEP, Mario Delgado Carrillo, convocó a las autoridades educativas, al personal con funciones de supervisión y a las maestras y maestros a informar y concientizar a las personas encargadas de la venta de alimentos en las escuelas sobre los nuevos lineamientos.
“Nuestro propósito es dejar de ser el país con mayor índice de sobrepeso y obesidad infantil, y lograrlo a través de la educación, para que esta generación de niñas y niños sea la más saludable, fuerte y feliz en la historia de México”, aseveró el titular de la SEP.
Delgado Carrillo enfatizó que el cumplimiento de estos lineamientos es responsabilidad de todos y que cualquier omisión debe ser notificada a las autoridades sanitarias correspondientes.
Se contemplan sanciones administrativas para los centros escolares que incumplan con estas disposiciones, que van desde multas económicas hasta posibles suspensiones temporales de operación. En sustitución, las escuelas deberán ofrecer alimentos nutritivos, equilibrados y preferentemente locales, además de garantizar el acceso al agua potable mediante la instalación obligatoria de bebederos.