Derrick Rose se retira de la NBA tras 16 años: El adiós de una leyenda marcada por las lesiones
El ex MVP pone fin a su carrera, su último equipo fueron los Memphis Grizzlies
Derrick Rose jugó con los Chicago Bulls del 2008 al 2016. / Jonathan Daniel
Derrick Rose, el ex MVP de la NBA, ha anunciado su retiro tras una carrera de 16 años en la liga. A través de sus redes sociales y mensajes en periódicos de las ciudades donde jugó, Rose compartió que se siente en paz con su decisión y afirmó que ahora es momento de dedicarse plenamente a su familia.
Rose, quien fue una de las figuras más prometedoras del baloncesto, deja un legado marcado por su talento, su resiliencia frente a las lesiones y su rol como mentor en los últimos años de su carrera.
Rose ingresó a la NBA en 2008 como la primera selección del draft, siendo elegido por los Chicago Bulls, su equipo de origen. En poco tiempo, se convirtió en uno de los jugadores más emocionantes de la liga, garcias sus impresionantes actuaciones ganó el premio al Novato del Año y fue seleccionado como All-Star en múltiples ocasiones.
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Su mayor logro llegó en 2011 cuando, con apenas 22 años, se convirtió en el MVP más joven en la historia de la NBA.
Sin embargo, su ascendente carrera se vio interrumpida en 2012 cuando sufrió una grave lesión en la rodilla durante los playoffs. A partir de ese momento, Rose batalló con una serie de lesiones que limitaron su participación en la liga y lo llevaron a convertirse en un jugador de rotación en distintos equipos.
Aunque nunca pudo recuperar su forma estelar, Rose mantuvo una presencia significativa en la NBA, destacándose como un jugador de apoyo y un mentor para las nuevas generaciones.
A lo largo de su carrera, Rose jugó para seis equipos distintos, incluyendo los Bulls, Knicks, Cavaliers, Timberwolves, Pistons y Grizzlies. En total, disputó 723 partidos, promediando 17.4 puntos y 5.2 asistencias por encuentro. Su momento más emotivo llegó en 2018, cuando anotó 50 puntos con los Timberwolves, un hito que simbolizó su perseverancia frente a las adversidades.
Aunque su carrera siempre será recordada con la pregunta de “¿Qué hubiera pasado sin las lesiones?”, Derrick Rose se despide como una leyenda del baloncesto y deja una huella imborrable en la NBA.
