La izquierda venció: resultados de las elecciones en Francia 2024
El Nuevo Frente Popular logró la victoria sobre Agrupación Nacional
La segunda vuelta de las elecciones parlamentarias en Francia tuvo lugar el pasado fin de semana, en donde la ultraderecha llegaba como el rival a vencer por parte de los opositores y del gobierno en turno.
La preocupación en Europa sobre la tendencia hacía la extrema derecha continúa creciendo, sin embargo, después de lo sucedido en territorio francés, parece ser una importante derrota para su avance político dentro del continente.
Una victoria que hace historia
Después de quedar en segundo lugar en la primera vuelta de las elecciones parlamentarias, el Nuevo Frente Popular hizo un llamado a la ciudadanía francesa para acabar con Agrupación Nacional, quienes vencieron durante la primera parte del ejercicio democrático.
El principal temor de los partidos y Macron era que el fascismo volviera a gobernar Francia y tuviera una fuerte presencia en el parlamento europeo. Al concluir la segunda parte de las votaciones, el Ministerio del Interior reveló resultados que sorprendieron en primera instancia.
Te puede interesar
La coalición de izquierda logró 182 escaños, mientras que la alianza centrista Ensemble del presidente Emmanuel Macron logró 163 escaños. Dejando en un lejano tercer lugar a la ultraderecha con 148.
La eterna candidata: Marie Le Pen
Después de una clara derrota, la candidata por parte de la extrema derecha declaró lo siguiente en conferencia de prensa:
“La marea está subiendo. Esta vez no ha subido lo suficiente, pero sigue subiendo. Y, como resultado, nuestra victoria, en realidad, solo se retrasa”.
— Marie Le Pen, candidata de Agrupación Nacional
La derecha dura, quien estaba pronosticada a gobernar, celebró su lugar en el Parlamento Europeo con calma y en silencio.
Sin mayoría calificada: Francia a la expectativa
Después de las celebraciones de la izquierda, llegó la duda. La cámara baja del Parlamento está a punto de ser ocupada por partidos y coaliciones que se detestan mutuamente, por lo que, deja al estado francés con dos interrogantes muy importantes: ¿Cómo se va a gobernar? y ¿Quién lo va a hacer?.
De momento, la obligación de Macron es nombrar a un nuevo primer ministro y lograr que los diputados de Agrupación Nacional estén de acuerdo con él, logrando evitar una moción de censura.
A día de hoy no hay un nombre claro para el puesto, mientras el presidente pierde la aprobación de la gente, la República Francesa se sumerge en una crisis política que puede tardar en encontrar una solución.