Mexicana es una apuesta muy arriesgada que necesitará un gran flujo de capital

En entrevista para Así Las Cosas con Primitivo Olvera, el analista experto en aviación, Carlos Torres, explicó que lo único que se rescató de Mexicana de Aviación fue el nombre, y que se trata de una nueva aerolínea.

Desde el punto de vista del contribuyente, el ‘rescate’ de Mexicana es un dinero a fondo perdido, porque durante los próximos años no se va a recuperar un punto de rentabilidad.

“Es, la verdad, desde mi punto de vista, una apuesta muy arriesgada que va a requerir un gran flujo de capital y que ese flujo de capital, si fuera un negocio privado pues no estaríamos aquí a lo mejor discutiéndolo… al tratarse de dinero público creo que si habrá que revisarlo con mucha lupa”.

Además, en su arranque, no se cumplió el plan de flota: tener 10 aviones para cubrir más de 20 rutas domésticas; en su lugar, inició con cinco aeronaves, dos pertenecientes a la Fuerza Aérea Mexicana, y tres más rentadas a la aerolínea regional TAR.