Anonymous vuelve al frente de batalla; lanza advertencia mundial
“Dejen libre a Assange o lo pagarán", esta fue la amenaza de los ciberactivistas tras la detención del fundador de WikiLeaks
Anonymous vuelve al frente de batalla; lanza advertencia mundial / Especial
La agrupación de hackers Anonymous volvió a resonar tambores tras la detención del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en la embajada de Ecuador en Londres.
Los ciberactivistas amenazaron: “Dejen libre a Assange o lo pagarán […] ¡Ha llegado el momento de que nos unamos, ha llegado el momento de que nos levantemos y luchemos!”
En un comunicado publicado poco después del arresto expresaron en Internet: “Este es un mensaje para el gobierno del Reino Unido y sus cohortes de todo el mundo que trabajan para silenciar a los denunciantes”.
“Están acercando el mundo libre a una revolución generalizada, y eso es, honestamente, lo que se necesita para detener estos avances constantes en nuestra libertad. Esta debería ser una revolución pacífica que se libra en muchos campos de batalla, incluido el ciberespacio, el dominio de Anonymous”, detalla su mensaje.
Y también advierte su comunicado: “cada persona poderosa que haya firmado esta orden debería estar temblando en sus botas, porque la fuerza de Internet está a punto de ser desatada sobre ellos. Desde la CIA, el presidente de los Estados Unidos, hasta los oficiales de arresto que sacaron a Assange de la embajada, se han expuesto como enemigos del pueblo y es hora de que Anonymous actúe en consecuencia.”
SOPITAS: Julian Assange
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Julian Assange fue detenido el jueves 11 de abril cuando la policía británica entró a la embajada ecuatoriana y lo sacó cargando por petición del gobierno de los Estados Unidos donde enfrentaría un juicio por revelar información clasificada de la guerra de Afganistán, Irak y cables diplomáticos.
El proceso de extradición podría tardar hasta 2 años y si la justicia lo lleva a la cárcel podría ser condenado hasta 5 años de prisión por hackear documentos clasificados.
Durante su estadía en la embajada de Ecuador, Julian Assange también enfrentaba sus propios demonios pues, al no poder salir, su salud física y mental estaban amenazadas, además se había hecho eco de su falta de higiene y problemas intestinales que por su situación no podían ser tratados en un hospital como una persona cualquiera.
La Cancillería de Ecuador expresó que le retiró el asilo al fundador de WikiLeaks por violar las “condiciones internacionales”. Apenas el 2 de abril, el presidente ecuatoriano Lenín Moreno acusó que al sitio de filtraciones de espiarlo y revelar en redes sociales fotos privadas.
