Beneficiar a unos cuantos, lleva a la corrupción y la violencia: Papa Francisco

Por Jaime ObrejoMéxico.- En su primer discurso de la visita de Estado y Pastoral a México, el Papa Francisco lanzó un mensaje que puso el dedo en llaga sobre los males que aquejan a la sociedad, y lo hizo ante políticos, impartidores de justicia, líderes religiosos y representantes de la sociedad civil mexicana

Advirtió que cuando se busca sólo el  beneficio de  unos cuantos y no el de todos,  se frena el desarrollo y la sociedad es víctima de la corrupción, el narcotráfico, la violencia y la muerte

En Palacio Nacional donde  recibió la bienvenida oficial a nuestro país, el jefe del Estado Vaticano aseguró que para forjar un futuro mejor, se requiere de hombres y mujeres justos y honestos, alejados del individualismo, que se comprometan con el bien común y la dignidad humana, aunque en este siglo el bien común no goza de buen mercado

"La experiencia nos demuestra que cada  vez que buscamos el camino del privilegio o beneficio de unos pocos, en detrimento del bien de todos, tarde o temprano, la vida en sociedad se vuelve un terreno fértil para la  corrupción, el narcotráfico, la exclusión de las culturas diferentes, la violencia, incluso, el tráfico de personas, el secuestro y la muerte, causando sufrimiento y frenando el desarrollo" explicó

Aunque recibió varias ovaciones durante su discurso, cuando habló de esto no hubo aplausos, tampoco cuando  dijo que una cultura ancestral como la mexicana con un capital humano esperanzador como son sus jóvenes, debe encontrar nuevas formas de dialogo, negociación y compromiso solidario, sobre todo aquellos que se dicen cristianos, deben construir un política auténticamente humana en la que nadie se víctima de la discriminación

"A los dirigentes de la vida social, cultural y política  les corresponde  de modo especial trabajar para ofrecer  a todos los ciudadanos la oportunidad de ser dignos actores de su propio destino, en su familia y en todos los círculos en donde se desarrolla la sociabilidad humana, ayudándoles a a un acceso efectivo a los bienes materiales y espirituales indispensables: vivienda adecuada,  trabajo digno, alimento, justicia real, seguridad efectiva, un ambiente sano y de paz" dijo

Sostuvo que todo esto no es un asunto sólo  de leyes sino de una urgente formación de responsabilidad  personal y colectiva. Cuente con la Iglesia católica para edificar la  civilización del amor, señor Presidente, le dijo el Papa a Peña Nieto quien escuchaba atento su mensaje

De hecho, poco antes, el mandatario mexicano, expresó que todos , gobierno, sociedad e iglesia están  llamados a edificar un mundo mejor, por ejemplo a los gobiernos les corresponde crear condiciones de bienestar, a  las Iglesias  promover la esperanza, la solidaridad, la fraternidad y, ante todo, el amor

De ahí la importancia, subrayó,  de tener un Estado laico, como lo es el Estado mexicano, que  vela por la libertad religiosa, protege la diversidad y la dignidad humana, aunque  siempre exista la disyuntiva de  hacer el bien, ser indiferente o dejarse llevar por el mal.

"La expresión de la diversidad es cada vez más aceptada, pero, al mismo tiempo, resurgen grupos intolerantes que convierten sus fobias en actos de odio. El individualismo, el consumismo y la permanente ambición de tener siempre más, no sólo provocan ansiedad y frustración, también atentan contra la solidaridad humana y el cuidado del planeta, que es nuestra casa común"  detalló

Antes de estos mensajes, como parte de la bienvenida oficial, el presidente Peña y el papa Francisco intercambiaron algunos obsequios, el mandatario mexicano le regaló dos  rosarios, uno de ámbar y otro de barro, además de un "Árbol de la Vida y dos libros. A su vez, el Sumo Pontífice le entregó un cuadro de la Virgen de Guadalupe hecho en mosaicos.