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Manchan casos de dopaje el prestigio del tenis argentino

El prestigio del tenis argentino, que tiene a cuatro jugadores en la lista de los 11 mejores a nivel mundial, se manchó esta semana ante la confirmación de un sexto caso de dopaje en los últimos cuatro años.

Buenos Aires, Argentina, 7 de octubre, 2005.- El prestigio del tenis argentino, que tiene a cuatro jugadores en la lista de los 11 mejores a nivel mundial, se manchó esta semana ante la confirmación de un sexto caso de dopaje en los últimos cuatro años.

La cifra de casos podría llegar a siete, si se confirma la información que el miércoles publicó el diario francés L'Equipe, según la cual Mariano Puerta dio positivo en el examen antidopaje que se le aplicó durante la final de Roland Garros en junio pasado.

El caso es el más grave que ha enfrentado el tenis argentino, porque si las acusaciones del rotativo son ciertas, Puerta será suspendido de por vida de los circuitos profesionales, ya que sería la segunda vez que da positivo en una prueba antidopaje.

Hasta el martes pasado, un día antes de la revelación de L'Equipe, el tenis argentino disfrutaba un momento de esplendor, lo que reflejaba en la inclusión de cuatro de sus jugadores en los primeros 11 lugares del ranking mundial.

Con los grandes papeles logrados en los últimos dos años en los circuitos de Grand Slam, Guillermo Coria, David Nalbandián, Mariano Puerta y Gastón Gaudio se adueñaron del octavo al décimo primer lugar de la lista de ases del tenis.

En lugares ya más lejanos, pero aún dentro de los 100 mejores tenistas del mundo, se sumaban los argentinos Guillermo Cañas, Juan Ignacio Chela, José Acasuso, Agustín Calleri, Mariano Zabaleta y Juan Mónaco. Pero la "luna de miel" entre el público y el tenis argentino se ensombreció de forma definitiva la víspera, al confirmarse que Mariano Hood, quien ocupa la posición 26 en dobles masculino del circuito internacional, dio positivo en Roland Garros.

Al tenista se le encontró una droga llamada finasteride, la cual favorece el crecimiento del cabello al disminuir la enzima producida por la hormona testosterona, responsable del tipo más frecuente de calvicie.

En deportes de alto rendimiento, al finasteride se lo considera una sustancia capaz de enmascarar el consumo de otras drogas, por lo que se le incluye entre las sustancias prohibidas.

Hood se convirtió así en el sexto jugador argentino acusado de dopaje, pues en 2001 Juan Ignacio Chela fue suspendido por tres meses luego de que se detectó que había ingerido metiltestosterona.

Ese mismo año, Guillermo Coria recibió una sanción de siete meses pese a que la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP) reconoció que era inocente porque había tomado un suplemento vitamínico contaminado.

El siguiente en la lista fue el propio Puerta, a quien en un torneo realizado en el balneario chileno de Viña del Mar en 2003 se le detectó clembuterol, por lo que tuvo que dejar de jugar durante nueve meses en circuitos profesionales.

Un año después, Martín Rodríguez recibió una advertencia de las autoridades del tenis profesional por exceso de cafeína, en tanto que a principios de 2005, Guillermo Cañas recibió una sanción de dos años fuera del circuito por consumir un diurético.

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