Rafael Caro Quintero, el ‘Narco de los Narcos’
Siempre se dijo que ofreció pagar la deuda externa mexicana

Por Verónica MéndezMéxico.- A 28 años de estar encarcelado, la leyenda del narco, Rafael Caro Quintero está a punto de dejar la prisión, luego de que un juzgado ordenó su libertad
Rafael Caro Quintero nació el 3 de octubre de 1952 en La Noria Badiraguato, Sinaloa, es uno de los narcotraficantes más famosos de la historia mexicana, conocido como el 'Narco de Narcos'
"Yo no estoy secuestrada..., yo estoy enamorada de Caro Quintero", fueron las palabras de Sara Cristina Cosío Vidaurri Martínez, hija del ex gobernador de Jalisco, cuando vio cómo la policía allanó la casa donde se encontraba con el llamado Narco de Narcos, Rafael Caro Quintero
Y fue en 15 minutos, lo que duró la acción espectacular para detener al fundador del cártel de Guadalajara, junto con Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo "Don Neto", un 4 de abril de 1985 en San José, Costa Rica
Caro Quintero, fue acusado de matar al agente de la DEA Enrique Camarena, y su piloto, el 7 de febrero de 1985. El cuerpo del Camarena apareció un mes después en un pueblo de Michoacán; por lo cual la agencia antidrogas encabezó la "Operación Leyenda"
El capo estaba en la lista de los más buscados de la DEA y cuando fue detenido se le decomisaron la casa donde se encontró, un arma chapada en oro con incrustaciones de diamantes, 300 mil dólares en efectivo, joyas por un valor de 1 millón de dólares y dos carros de lujo
Además, cuatro propiedades valoradas en 1,9 millones de dólares: una en San José de la Montaña, otra en Bello Horizonte de Escazú, una más en Vázquez de Coronado y la quinta de San Rafael de Ojo de Agua, donde fue detenido
Las inversiones de Caro Quintero en Costa Rica sobrepasaron los 2,5 millones de dólares
Sin que ninguna autoridad de ese momento lo reconociera, el Greñas, apodo de Caro Quintero, ofreció al gobierno del entonces Presidente Miguel de la Madrid que si lo dejaban "trabajar" dos años sin que le molestaran sus cultivos de marihuana, ni sus demás negocios, se comprometía a pagar la deuda externa mexicana. Si bien posteriormente el capo sinaloense negaría haber hecho tal declaración, la verdad es que no resulta tan importante si lo dijo o no, sino que buena parte de la población lo creyó posible y, más aún, deseable
La imagen heroica de Caro Quintero salía en charlas de café como en los múltiples corridos que en su honor se compusieron. La supuesta oferta se repetía y comentaba en conversaciones, e incluso se llegaría a cantar en corridos como "La captura de Quintero"



