Naufragio en Sicilia: encuentran cuatro cuerpos en labores de rescate
El yate hundido frente a la costa de Palermo está a casi 50 metros de profundidad, lo que ha dificultado las acciones de los buzos
Las cuadrillas de rescate han recuperado cuatro cuerpos del interior del velero de lujo “Bayesian” que se hundió el pasado lunes frente a las costas de Sicilia. Entre los fallecidos podrían estar el magnate británico Mike Lynch y su hija de 18 años, según informan fuentes cercanas al operativo. Las operaciones de rescate han sido transmitidas en vivo y han generado gran expectación en Italia.
Circunstancias del naufragio
El “Bayesian”, de 56 metros de eslora, se hundió rápidamente tras ser sorprendido por una tormenta en la madrugada del 19 de agosto. Los testigos describen que la embarcación se volcó y desapareció en cuestión de minutos.
A bordo viajaban 22 personas, de las cuales 15 lograron sobrevivir. La operación de búsqueda ha sido difícil debido a la profundidad y las condiciones del naufragio.
Este yate de lujo fue construido en 2008 y renovado en 2020. Propiedad de Angela Bacares, esposa de Mike Lynch, estaba equipado con el mástil de aluminio más alto del mundo, de 72 metros.
Lynch, una figura destacada en el mundo tecnológico británico, había vendido su empresa Autonomy a Hewlett Packard en 2011, transacción que desencadenó una serie de disputas legales. Lynch estaba de vacaciones con diferentes familiares en Sicilia al momento del naufragio.
Te puede interesar:
Investigación en curso: posibles causas del hundimiento
La fiscalía de Termini-Imerese ha iniciado una búsqueda para determinar las causas del hundimiento del yate de lujo. Se barajan varias hipótesis que incluyen la posibilidad de un tornado marino o una ráfaga de viento extremadamente fuerte.
Aunque inicialmente se sospechó de una posible rotura del mástil, las primeras inspecciones indican que este se encontraba intacto, lo que sugiere la posibilidad de un choque con un banco de arena.
Las labores de rescate han sido particularmente complejas debido a la posición del barco a 50 metros de profundidad, con espacios interiores bloqueados por escombros. Los buzos solo disponen de pocos minutos bajo el agua antes de tener que regresar a la superficie, lo que ha ralentizado el proceso.
Un robot submarino ha sido desplegado para facilitar la exploración y la recuperación de los cuerpos restantes, mientras las autoridades continúan con la investigación de las circunstancias exactas del accidente.