Adrián Marcelo: por qué está mal ser psicólogo y burlarse de la depresión
El youtuber indignó a las redes tras acosar a Gala Montes por sufrir este padecimiento mental
Adrián Marcelo se graduó como psicólogo en la Universidad Autónoma de Nuevo León, institución que no se ha pronunciado sobre la burla que hizo de una participante con depresión / Captura de pantalla
Adrián Marcelo atacó a Gala Montes por padecer depresión, en una escena de La Casa de los Famosos 2 que generó indignación en redes sociales.
El malestar por la agresión, donde minimizó la condición médica de la joven, aumentó cuando se reveló que el regiomontano se graduó como psicólogo en la UANL, una profesión que se encarga precisamente de tratar a personas con padecimientos mentales.
La situación ya generó una petición en Change.org para que al youtuber se le retire su cédula profesional.
La depresión tiene mayor prevalencia entre las mujeres, de acuerdo con la OMS / simpson33
Qué dijo Adrián Marcelo
Este personaje al interior de LCDLF es conductor en la televisión de Nuevo León y youtuber, se burló de la salud mental de Gala Montes durante una discusión en la madrugada del 6 de agosto.
Marcelo dijo que le hacía falta la figura materna y aseguró que no padece de la enfermedad mental, sino que es una mera actuación. Además, acusó que quien la diagnosticó era un charlatán, para rematar dando a entender que las mujeres van y buscan un diagnóstico para que les receten medicamentos psiquiátricos.
Sin embargo, ella admitió que estaba bajo tratamiento por ansiedad y depresión desde que ingresó al programa de televisión.
Aunque se disculpó con ella, a sus espaldas afirmó que no le parece justo que le impidan hablar de su enfermedad.
Se trata del último desencuentro por el que se señala a Adrián Marcelo de machista, misógino y clasista, además de xenofóbico dentro de La Casa de los Famosos 2, ya que también culpó a Brigitte Bozzo de los abuso que sufrió con una expareja, quien le hacía tocamientos cuando estaban en sitios públicos. “Es por como viste”, dijo en aquella ocasión.
Gala Montes reveló que está bajo tratamiento por depresión desde antes de ingresar a LCDLF / Captura de pantalla
Depresión en México
En México, 3.4 millones de personas han experimentado algún episodio depresivo en su vida, de acuerdo con el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI), en su mayoría mujeres. A nivel mundial, México ocupa el lugar número 16 con más casos de la enfermedad.
En el mundo, se estima que 300 millones padecen este trastorno que es 50% más frecuente en las mujeres,
La Organización Mundial de la Salud define a la depresión como un trastorno común de la salud mental que se caracteriza por la tristeza permanente y falta de interés o placer en actividades que antes le eran gratificantes o placenteras. Otros síntomas son:
- Dificultad para concentrarse
- Sentimiento de culpa excesiva o de baja autoestima
- Falta de esperanza acerca del futuro
- Pensamientos de muerte o suicidio
- Alteraciones del sueño
- Cambios en el apetito o en el peso
- Sensación de cansancio acusado o de falta de energía.
De acuerdo con el organismo mundial, el tratamiento psicológico es el primer abordaje de la depresión, ya que puede enseñar nuevas maneras de pensar frente a diversas situaciones o de relacionarse con los demás.
Los Psicólogos tienen Código de Ética en México
La Sociedad Mexicana de Psicología cuenta con un Código Ético que regula el quehacer profesional y para el cual llevó a cabo consultas con sus afiliado. Entre sus normas de conducta, están:
- Respetar la dignidad y el valor de todas las personas y el derecho a la privacidad, confidencialidad, autodeterminación, diversidad y autonomía.
- Respetar las diferencias individuales, culturales, de género, etnia, religión, ideología, orientación sexual, condición socioeconómica, u otras.
- Debe brindar atención profesional de acuerdo con su formación y reconocer las fronteras de su disciplina.
- Guiarse por principios de probidad, honestidad, justicia y respeto por los otros en su ejercicio profesional.
- Evitar comportamientos en su vida privada que puedan generar dudas públicas sobre su honestidad o conformación ética que afecten la imagen de la profesión.
- Teneŕ presente su responsabilidad profesional y científica hacia la comunidad y la sociedad en que trabaja y vive.
- Las actividades personales o conductas privadas del psicólogo quedan dentro de la jurisdicción del Código de Ética, sólo cuando trascienden al ámbito público y ponen en riesgo el prestigio de la profesión.
