CON MARTHA DEBAYLE. Embriones artificiales para ¿trasplantes médicos?

Embriones artificiales para ¿trasplantes médicos? Iván Martínez-Duncker, fundador de la Sociedad Latinoamericana de Glicobiología nos explica.

Ciudad de México

Basados en un experimento con ratones, una empresa de Biotecnología Israelí, quiere tomar ADN humano para crear embriones artificiales y “cultivar” órganos para trasplantes médicos.

De acuerdo a Science Insider, una empresa de biotecnología con sede en Israel quiere replicar un experimento reciente que creó con éxito un embrión de ratón artificial a partir de células madre, solo que esta vez con células humanas.

Los científicos del Departamento de Genética Molecular de Weizmann cultivaron «embriones de ratón sintéticos» en un frasco sin el uso de esperma, óvulos o matriz. Los científicos observaron que los embriones sintéticos tenían un corazón que late, circulación sanguínea, el comienzo de un cerebro, un tubo neural y un tracto intestinal.

MEDICINA REGENERATIVA

Hay una gran necesidad de regenerar tejidos y órganos enfermos, por ejemplo, 20 personas mueren diariamente en México por falta de órganos que les podrían ser donados. Por otra parte, la población envejece y esto está costando cada vez más a los gobiernos por los temas de salud consecuentes, hay un interés de limitar el envejecimiento de los tejidos y órganos a través de distintas estrategias, lo cual ha llevado a desarrollar una disciplina médica llamadamedicina regenerativa.

En gran medida la “medicina regenerativa” se basa en el uso de células madre y las células madre son células que tienen la capacidad de diferenciarse en distintos tipos de células, de corazón, de riñón o de cerebro. Estas células madre con distintas capacidades pueden inyectarse en el cuerpo y regenerar tejidos enfermos como, por ejemplo, un corazón después de un infarto donde una parte del corazón murió, hay tecnología para obtener células madre con todo esta potencial, a partir de una célula de piel.

CREACIÓN DE EMBRIONES

El embrión es la etapa inicial del desarrollo de un ser vivo mientras se encuentra en el huevo o en el útero de la hembra.

En el caso específico del ser humano, el término se aplica hasta la octava semana desde la concepción (fecundación), a partir de la novena semana,123 el embrión pasa a denominarse fetO.

Sobre la información de Science Insider, la empresa Israelí, se ha basado en trabajos del grupo de investigación del Jacob Hanna del Instituto Weizmann en Israel, los logros recientes de este grupo han sido generar el desarrollo de embriones de ratón (aunque no de forma completa sino hasta etapas tempranas cuando se inicia la formación de órganos) a partir de células madre.

Esto sucede por primera vez en el mundo y la razón por la cual le llaman embrión sintético es porque no requiere de la fertilización de un óvulo por un espermatozoide sino que deriva directamente de una célula madre que es direccionada para iniciar un embrión.

Algunos investigadores externos al grupo de este doctor mencionan que no deben ser llamados embriones porque no dan lugar a un organismo en su etapa final ni con la capacidad de reproducirse y que en todo caso se deberían llamar embrioides.

Es importante mencionar que lograron que este “embrión sintético o embrioide” se desarrollara fuera de un útero, es decir, dentro de frascos de cultivo. Estos avances son el punto de partida para la empresa Renewal Bio, quienes muy posiblemente estén buscando inversionistas ya que están en una etapa muy temprana de desarrollo.

Estos avances, que es uno entre muchas estrategias, permite proponer hacer estudios similares pero ahora con células humanas, permitiendo:

• Tener una forma de estudiar enfermedades que ocurren al principio del desarrollo humano.
• Conocer mejor cómo se forman los órganos y tejidos, pudiendo con ello sentar las bases para producir estos embrioides a partir de la célula de piel de un paciente y recuperar de este embrioide las células u órganos que permitan regenerar el cuerpo y salvar una vida

  Fuente: Iván Martínez-Duncker, Médico Cirujano por la Escuela Médico Militar