7 mitos y realidades sobre las hormonas
¿Para qué sirven las hormonas? Les vamos a dar unas clases infernales sobre ellas
7 mitos y realidades sobre las hormonas
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Ciudad de México
Dr. Oded Stempa, especialista en endocrinología por la UNAM. Jefe de la División de Endocrinología del centro médico ABC. Conferencista con más de 700 charlas impartidas en México y el extranjero.
Teléfonos: 5272-2419 y 5276.9278
Consultorio 207 de la torre mackenzie del centro médico abc campus observatorio
FB: Dr Stempa
¿Qué son las hormonas?
• Las hormonas son los mensajeros químicos del cuerpo que controlan numerosas funciones y circulan a través de la sangre hacia los órganos y los tejidos. Estos componentes químicos intervienen en los procesos del:
o Metabolismo.
o Crecimiento y desarrollo.
o Reproducción.
o Además, afectan al estado de ánimo y al apetito sexual.
• Algunas de las hormonas más importantes son la insulina, las hormonas tiroideas, el cortisol, la hormona del crecimiento y la prolactina, entre otras.
¿Para qué sirven?
• Las hormonas le dicen a tu cuerpo cómo respirar, crecer, beber y comer.
• Si tienes un ciclo menstrual, tus hormonas reproductivas cambian constantemente a lo largo de tu ciclo, a menos que tomes ciertos tipos de anticonceptivos hormonales.
• El desequilibrio hormonal puede ser causado por afecciones como diabetes, trastornos de la tiroides y el síndrome de ovario poliquístico (SOP).
1. Las hormonas solo son responsables de alterar las emociones
• No, Cada glándula productora de hormonas en el cuerpo produce una hormona con un propósito muy especializado.
o Hipotálamo: regula la temperatura corporal, el hambre, el estado de ánimo, la sed, el sueño y la libido.
o Hipófisis: es la glándula "Mago de Oz", que controla otras glándulas detrás de escena.
o Paratiroides: regula el calcio.
o Páncreas: produce insulina para ayudar a usar los alimentos como energía.
o Tiroides: regula los latidos del corazón y cómo se usan las calorías.
o Glándulas suprarrenales: producen las hormonas del estrés.
o Glándula pineal: produce melatonina para regular el reloj del cuerpo.
o Ovarios: secretan hormonas sexuales para su uso en el ciclo reproductivo.
o Testículos: produce testosterona y esperma
2. Un largo consumo de anticonceptivos hormonales puede desencadenar enfermedades oncológicas
• En realidad, si los anticonceptivos fueron seleccionados por un buen médico a base de un análisis y se tomaron sin irregularidades, entonces son beneficiosos para la salud y pueden reducir el riesgo del desarrollo de algunas formas de enfermedades oncológicas, por ejemplo, cáncer de endometrio, ovárico y colorrectal. Al mismo tiempo, entre más tiempo consumas los medicamentos, menor será el riesgo de su desarrollo.
• Sin embargo, los resultados de una serie de investigaciones indican que el riesgo de desarrollo de cáncer de mama ligeramente se incrementa. Por eso el doctor debe seleccionar los anticonceptivos a base de una recopilación detallada del historial médico de la paciente.
3. Los análisis hormonales no son concluyentes, porque el equilibrio hormonal siempre cambia
• Por supuesto, el equilibrio hormonal varía a lo largo del día y el ciclo mensual (en las mujeres). Sin embargo, cada hormona tiene su propio tiempo, cuando se puede verificar su funcionamiento en el organismo.
• Por ejemplo, el análisis del nivel hormonal de la glándula tiroides se tiene que hacer en un horario matutino de 8:00 a 10:00, siempre en ayunas y en un estado emocional extremadamente tranquilo. Las hormonas sexuales, progesterona: en la segunda fase del ciclo del día 21, prolactina: en el primer y cuarto día del ciclo según lo recomendado por el ginecólogo, estrógeno: el quinto y septimo día del ciclo.
• Un médico competente siempre indicará exactamente cómo se deben realizar ciertas pruebas teniendo en cuenta el horario.
4. Todas las mujeres en edad de menopausia deben recibir terapia de reemplazo hormonal
• La menopausia no es una enfermedad, es una etapa en la que termina el periodo de vida reproductiva de la mujer y sólo en casos específicos se recomienda el uso de hormonas de remplazo. Lo que si deben hacer todas las mujeres que se encuentran en ésta etapa son cambios en el estilo de vida, como evitar el cigarrillo, disminuir el consumo de bebidas alcohólicas, realizar dieta sana y actividad física.
5. Todos los anticonceptivos hormonales contribuyen al aumento de peso
• Es sabido que el aumento en el nivel de estrógenos puede conducir a la desaceleración del metabolismo y la acumulación de tejido adiposo. Y los medicamentos más habituales hoy en día son anticonceptivos combinados que contienen estrógeno y progestágeno (la forma sintética de la progesterona).
• Realmente tal problema pudo existir en los años 60’s y 70’s del siglo XX, cuando tales medicamentos recién aparecían y contenían altas dosis de estrógeno.
• Los medios modernos contienen hormonas sintéticas que fueron creadas teniendo en cuenta las particularidades del organismo femenino y no conducen al aumento de peso.
• En los efectos secundarios, a veces se puede mostrar un aumento de peso, pero, por lo general, esto no es más de 2 kilogramos al año y se presenta en un pequeño porcentaje de mujeres, propensas a la inflamación de los tejidos.
6. Las hormonas también alteran el sueño
• Las hormonas sólo son responsables del 50 por ciento de los trastornos del sueño.
• El 60 por ciento de la población que sufre trastornos del sueño son mujeres, de las cuales más del 30 por ciento están en edad de la menopausia, etapa a la que se suma la aparición de ronquidos por la desprotección que supone la bajada de estrógenos.
• El insomnio de la menopausia se debe al cambio de la temperatura corporal, a los típicos sofocos nocturnos.
• Los tratamientos a base de cronoreguladores del ritmo circadiano (temperatura) y hábitos de modificación de conducta pueden desempeñar una función importante en el manejo de los sofocos.
7. Vitamina D, más una hormona que una vitamina
• La vitamina D no es una vitamina, sino una hormona, porque actúa en prácticamente todos los órganos y sistemas del organismo y que, además, no es solo una, ya que se trata de varias sustancias complejas interconectadas.
• La hormona D tiene receptores en distintos lugares del organismo, como los huesos, el páncreas, el sistema cardiovascular y el sistema inmune. Además, juega un papel clave relacionado con la absorción intestinal del calcio o el mantenimiento de la homeostasis ósea y muscular a través de la modulación del metabolismo del calcio y el fósforo.
• Por otro lado, la hormona D presenta funciones paracrinas y autocrinas, regulando la proliferación y la diferenciación celular.