Operativo militar regresa a sus hogares a 170 familias de Nueva Esperanza
Un respiro para los chiapanecos permite que familias entreras regresen a sus hogares, tras narco enfrentamientos
Pobladores de Nueva esperanza huyeron de sus hogares desde finales de julio antes los enfrentamientos de células criminales.
Un operativo en conjunto de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional y la policía estatal, consiguió que al menos 170 familias, del municipio de Chenalhó, Chiapas, retornaran a sus hogares, el viernes 9 de agosto.
Aproximadamente 500 pobladores de la comunidad de Nueva Esperanza, que huyeron de sus viviendas a las localidades aledañas, desde finales de julio, ante el asedio del crimen organizado y enfrentamientos armados entre “Los Herrera” y “El Machete”, lograron regresar a sus hogares, después de que se instalara un campamento de seguridad operado por la Sedena, la Guardia Nacional y la policía estatal.
Los habitantes arribaron a su localidad en vehículos del ejército, mientras otros tantos se transportaron en sus propios carros, lo que dio un respiro a los habitantes, después de pasar varios días fuera de sus comunidades y entre el fuego cruzado de los narco enfrentamientos.
Después de casi un mes familias, de la comunidad de Nueva Esperanza, lograron regresar a sus casas, tras esconderse en localidades aledañas por asedio de crimen organizado.
Cabe señalar que este hecho se da un día después de que surgiera el nuevo grupo de autodefensa presuntamente integrado por exmiembros del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), que a través de un videomensaje, informara que defendería a las comunidades de Chenalhó, La Esperanza y Tzanembolom, ante el incremento de la violencia.
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En Chiapas ha ido en aumento los enfrentamientos de células criminales. De acuerdo con datos del secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, el estado ha registrado un incremento del 152.4% de homicidios con respecto del 2023.
El pasado 2 de agosto, durante la induración del puente atirantado La Concordia, proyecto que estuvo pausado por un mes ante los enfrentamientos entre grupos criminales; el presidente Andrés Manuel López Obrador promedió la intervención del gobierno para controlar la violencia en el estado del Sur. Además, de hacer un llamado a la población mayor para que alejen a los jóvenes de los malos pasos.
“Tenemos que buscar la unidad de nuestro pueblo, la gente mayor, hay que hablar mucho con los jóvenes, que no se nos denigren nuestras familias y nosotros vamos a seguir procurando que haya bienestar para que se consiga la paz, porque la paz es fruto de la justicia”, comentó el primer mandatario.