El paso de la niñez a la adolescencia: cambios frecuentes, cómo tratar, tips

Uno de los cambios más notorios es la pubertad-adolescencia, esa temida etapa en la que tus pequeños dejan de serlo y comienzan cambios que esperarías poder avanzar para evitar conflictos debido a sus constantes cambios que los hacen estar irritables, siendo así una separación de su niñez.

El Doctor, pediatra y endocrinólogo, Miguel Ángel Guañeli nos habla sobre los cambios en los pequeños al recibir esta etapa, para que puedas saber qué esperar como padre y de qué manera deben ayudar al proceso.

Vamos a separar dos cosas importantes, una cosa es la pubertad y otra es la adolescencia, la primera es física, mientras que la segunda es externa y mental, las niñas la mantienen durante 3 años a partir de los 12 y los niños 4 años desde los 13. La neurociencia indica que este proceso termina aproximadamente a los 24 años de edad, donde se consigue la madurez.

No hay una respuesta clara, hay hipótesis y estudios que hablan sobre las posibles soluciones de por que se está adelantando, algunos indican que es la alimentación, pero todo descarta que el pollo tenga hormonas o algo que altere el proceso, lo que sí se registra es que las niñas están creciendo con una mejor alimentación, (...) incluso el estrés prematuro podría ser, esto hablando de la parte física.

Las niñas y niños están muy expuestos a los medios de comunicación, incluso antes de los cambios hormonales, por eso pueden estar despiertos desde más pequeños (...).

—   Doctor, pediatra y endocrinólogo, Miguel Ángel Guañeli

¿Cómo reconocer los cambios rumbo a la adolescencia?

• Cambios físicos
• Olor más fuerte del cuerpo
• En niñas nace el botón de los senos
• Crecimiento de los testículos en varones
• Salida de vello púbico
• Ideas diferentes en cuanto a gustos
• Cambios de humor constante
• Aparición del periodo menstrual

Estos cambios deben ser después de los 8 años, si es antes puede ser una adolescencia precoz, por lo que será necesario que los lleven con el pediatra. El derecho a la privacidad es fundamental, pero hay que hablar con los menores y que tengan la confianza de avisar a sus papás cuando estos cambios se hagan presentes, para así poder llegar con el endocrinólogo y dar un seguimiento, ayudando a saber que todo está surgiendo de manera correcta.

—   Doctor, pediatra y endocrinólogo, Miguel Ángel Guañeli