Tauromaquia, expresión artística de emociones y oportunidades de trabajo

Ciudad de México

La tauromaquia es una expresión artística que muestra una cultura donde se pueden generar sensaciones y vibrar con emociones de manera única e irrepetible, sin ninguna segunda vista, todo creado al unísono con el toro, defendió en Así las Cosas el gerente operativo de la Plaza México, Mario Zulaica, ante la reciente prohibición de los espectáculos taurinos en la Ciudad de México.

En entrevista con Gabriela Warkentin y Javier Risco, uno de los encargados de “La México”, como es llamada la plaza más grande de corridas de toros del mundo, asegura que los taurinos no gozan con ver el sufrimiento animal, sino que para ellos, dichos espectáculos son una representación de la vida y del enfrentamiento con la muerte, y de los cuales, se han creado expresiones musicales, de pintura, escritura, poesía, entre otras.

Zulaica recordó que esta actividad está regulada por una Ley de Celebración de Espectáculos Taurinos, y por un Reglamento Vigente desde 1997. Respecto al maltrato animal que denuncian los antitaurinos, señala que depende del uso con el que se considere al animal, pues dijo, no es lo mismo un animal de compañía que un animal silvestre.

“Todo va dependendiendo del tipo de uso y de la explotación que se le dé. En este caso al toro bravo no se le da ninguna explotación, al toro bravo vive en un ambiente sano, en un ambiente libre, en una crianza donde hay 267 ganaderías constituidas y 167 mil hectáreas de recursos naturales que conservan la flora y la fauna”.

La postura de “La México” también señala que los espectáculos taurinos siempre han tenido cabida dentro de ese régimen de libertades. Existen como una manifestación cultural y tradicional en ejercicio de la libertad personal que tiene distintos aspectos o vertientes. Así, tanto la realización, como la participación, asistencia o inasistencia a los espectáculos taurinos, constituye el ejercicio de la más elemental libertad personal.

Además, han ligado las actividades taurinas al ejercicio de la libertad de trabajo, que es un derecho humano reconocido y protegido por la Constitución, pues a nadie se le puede privar desarrollar la profesión industria o comercio que le acomode siendo lícita; y, las actividades taurinas, incluidos los espectáculos taurinos, son lícitos en tanto que no existe norma alguna que los prohíba.

"Actualmente, está en vigor una suspensión de las actividades taurinas en lo que se resuelve sobre la constitucionalidad de las normas impugnadas en el Amparo, y estamos preparando un recurso en contra de la misma. El recurso tendrá por objeto que se revisen, por un Tribunal Colegiado de Circuito, los criterios en los que el Juez se basó para otorgar la suspensión de los espectáculos taurinos en la Ciudad de México".