"Despachos de abogados pasaron a segundo término en Pandora Papers”

México

El rol de los despachos de abogados internacionales pasó a segundo término en “Pandora Pepers”, no hay que olvidar que olvidar que los involucrados son personas con posibilidad de cambiar leyes, en un círculo vicioso que solo se puede atacar con voluntad política, así lo afirmó el doctor Juan Jesús Garza Onofre, del Investigaciones Jurídicas de la UNAM.

En su colaboración para "Así las Cosas" con Gabriela Warkentin y Javier Risco, Garza Onofre recordó que “en este mundo cualquier relación económica política tiene que pasar por un filtro jurídico” y que los abogados deberían ser el primer filtro de legalidad para este tipo de operaciones, pues aseguró “esto no se le ocurrió a Shakira ni a ninguno de los Julios”.

Y reconoció que hay cientos de abogadas y abogados que traducen sus pretensiones e intereses hacia estrategias para poder evadir impuestos.

Los paraísos fiscales dijo son países que ofrecen regímenes tributarios preferentes con tasas de impuesto muy bajas y no tiene nada de informal, como sucede en Belice, Panamá, Maldivas, Barbados, etc. Y las offshore, “empresas que se caracterizan por estar ubicadas en un país distinto a donde se genera riqueza o capital de la actividad económica”.

Entonces, ¿Para qué hablarle a un abogado?

Garza da el ejemplo de alguien que vive en Argentina y quiere comprar una casa en Miami, esta le va a salir muy cara debido a los alto impuestos que deberá pagar; sin embargo, si crea una empresa en Panamá y traslada sus recursos a Panamá, los impuestos van a ser nulos o muy bajos. ¿Es ilegal este trámite?

“Depende, no si compras la casa con tu offshore y la declaras en tu país, caso del exconsejero jurídico Julio Sherer”, narrativa que dijo están usando muchas celebridades.

Pero si compras la casa en Miami desde Panamá y no la declaras, ahí es donde empiezan los problemas, lo ilegal es no avisar a las autoridades de tu país, señaló.

Es ahí donde radica la labor de despachos internacionales que solo buscan rentabilizar, como Alcogal, con sede en Panamá que creó más de 200 empresas ficticias y está involucrado en casos de corrupción como el de Odbrecht o la FIFA.

Es con estos actos de corrupción que se crea un cuello de botella, con despachos que se encargan de ocultar este tipo de transacciones, cuando deben tener responsabilidad con el estado de derecho y la legalidad, dijo.

En su análisis Garza afirma que “ser rico no es delito el problema es cómo se han generado esas riquezas que tienen que pagar impuestos”, concluyó.