CON GABRIELA WARKENTIN Y JAVIER RISCO. "Reducir las garantías de defensa y meterse con el árbitro es autoritario"

Estamos en un debate muy importante para el país que tiene que ver con el ejercicio del poder, “reducir las garantías de defensa y meterse con el árbitro es totalmente autoritario", así lo comenta la investigadora del CIDE, Ana Laura Magaloni.

En el espacio de "Así las Cosas" con Gabriela Warkentin y Javier Risco, la investigadora recalcó que el Presidente tiene una legitimidad y una popularidad que viene de las urnas, de la gente, y esa nadie se la cuestiona, pero hay una segunda legitimidad, la que da gobernar con la Constitución y las leyes.

Esa legitimidad jurídica en su gobierno ha sido cuestionada desde muchos frentes: organismos autónomos, burocracias federales, los usuarios de los sistemas de salud, de las instancias infantiles, por lo cual los tribunales son los únicos que pueden decidir si lo que está haciendo la 4T es apegado a derecho, señala la especialista.

Actualmente refiere Magaloni el tema central de esos litigios se centra en la reforma energética y aunque reconoce que no es descabellado el dicho del presidente “si me dicen que esto es inconstitucional reformo la constitución”, así sucede en cualquier lugar. Sin embargo conseguir los votos para reformar esto es difícil, afirma.

No obstante, la investigadora del CIDE asegura que lo único que puede proteger a las empresas es la suspensión, es la única protección, una garantía judicial no solo en México, sino en el mundo.

Y asegura que para que una empresa no quiebre y no se termine en la cárcel lo único es el acto de suspensión, por lo que afirma que “de aquí a la corte resuelva el fondo del asunto necesitas por lo menos poder reguardar tu dinero, tus inversiones, eso es lo que Morena en una iniciativa pretende acabar”.

Señala que “no es cualquier reforma reducir las garantías judiciales que tienen los ciudadanos y los particulares frente al Estado cuando se está litigando y cuestionando tanta legalidad y constitucionalidad. La señal que manda el Presidente es yo no me voy a someter al límite de la Constitución”, lo que afirma Magaloni es extraordinariamente delicado.

Un gobierno democrático llega por las urnas y debe gobernar con la Constitución en la mano, advierte Ana Laura, por lo cual si el límite constitucional se borra, deja de ser un régimen democrático y el único límite sería político, como en el viejo régimen.

El Presidente tiene que hacernos ver que el poder judicial tiene el espacio para definir esos límites y que cuando lo haga él tiene que acatar esos límites y eso no está claro que lo vaya a hacer mandar iniciativas, criticar a jueces públicamente, mandarlos investigar y ejercer la presión desde el micrófono presidencial contra ellos, esas no son buenas noticias para nuestro país.

Magaloni afirma que la suspensión dictada por el juez ante la reforma energética no fue un acto improvisado de poder, está bien documentada e integrada y sin ella el país no va a poder lidiar con la reforma energética. La solución de esto llevará un año o dos.