Lo increíble del cerebro humano

México

Ninguna especie animal aspira a ser más de lo que es, solo el ser humano. El cambio de la dieta modificó la evolución del cerebro: un órgano que pesa 2% del peso corporal consume 25% de la energía, la diversidad de su aporte calórico lo hizo más eficiente, era así o comer verduras durante 9h al día. Se cocinó, cambio la digestión, la flora intestinal que influyen en cambios neuroquímicos y comer se convirtió en un proceso de convivencia social, cambiaron los tiempos para vivir. Eduardo Calixto, neurofisiólogo, médico cirujano con Maestría y Doctorado en neurociencias por la UNAM, nos hablará hoy sobre lo bueno y lo malo de nuestro cerebro humano.

Al nacer tenemos un 25% de la masa cerebral, el cerebro humano crece más cuando menos se desarrolla el cuerpo, pero la inteligencia y memoria no siempre van en relación con el tamaño.

Los humanos tenemos cien mil millones de neuronas y más corteza prefrontal. También tenemos más células de la glía y más sinapsis. Nuestras neuronas están más ramificadas, tenemos la relación cuerpo/cerebro más proporcionada de los mamíferos. En la evolución ganamos mucha corteza cerebral, el 60% de homología de material genético (ADN) de una mosca y 95% con un simio. Tenemos la capacidad de razonar frente a distintas situaciones que se nos presentan, pero no muchas veces lo hacemos de manera positiva aquí una lista de lo bueno y lo malo de tener un cerebro tan evolucionado:

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Lo bueno

1. Integrar información externa, discriminar y comparar con experiencias previas.

2. Planificar y prever el futuro.

4. Conocer sus enfermedades y procurar su salud.

5. Generar y utilizar tecnología que ayuda: volar, correr, comunicar.

6. Simbolismos e interpretación de emociones.

7. Capacidad prosocial y sentido moral.

8. Amar (enamorarse lo pueden hacer algunos mamíferos).

Lo malo

1. Hacer guerras (10% de las muertes, las ha causado una guerra).

2. Evitar cooperar socialmente, aislarse.

3. Amenaza a otras especies.

4. Comer cuando no se tiene hambre.

5. Generar adicciones psicológicas y farmacológicas.

6. Violencia premeditada contra su propia especie, genes y entorno.