En este sexenio el balance en materia de derechos humanos es desfavorable: CNDH

México

A ocho meses de concluir el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto, el balance en materia de derechos humanos es desfavorable, pues no habido un cambio significativo en la defensa y protección de las garantías sociales, por el contrario, se han agravado la inseguridad, violencia, impunidad, corrupción, desigualdad y pobreza.

Así lo aseveró el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Luis Raúl González Pérez al rendir en la residencia oficial de Los Pinos su informe anual de actividades en el 2017, ante el presidente Enrique Peña Nieto, a quien pintó un panorama desolador no solo respecto al año pasado sino en lo que va de su gobierno.

"Hasta hoy el balance no es favorable. México no ha experimentado un cambio significativo y objetivo hacia un mayor respeto y vigencia de los derechos humanos; tampoco se ha logrado fortalecer sustantivamente nuestro Estado Democrático de Derecho, ni se ha modificado positivamente el entorno que, cuando se inició su mandato, ya enfrentaban, de manera cotidiana millones de mexicanas y mexicanos, caracterizado por los binomios inseguridad y violencia, impunidad y corrupción, desigualdad y pobreza".

El Ombudsman resaltó que en 2012 se registraron 21 mil 459 homicidios dolosos, pero en 2017, la cifra se elevó a 25 mil 340, la cifra más alta en los últimos 20 años, según datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Aseguró que sin seguridad jamás habrá una vigencia real de los derechos humanos, enfatizó que los mexicanos necesitamos mayor seguridad , pero no a cualquier costo ni por cualquier medio, pues la violencia ha demostrado ser una inversión poco redituable y tiene un alto costo para todos.

"El dolor y el sufrimiento derivado de miles de personas que han sido privadas de la vida, que han sido lesionadas en hechos de violencia, que se encuentran desaparecidas, que se han visto forzadas a desplazarse de sus lugares de origen por la inseguridad o que han sido víctimas de algún delito es algo que no se puede cuantificar ni reparar. Son saldos de dolor e impunidad, que no han disminuido durante este periodo".

Es más, ante un Peña Nieto que escuchaba muy serio el informe, Luis Raúl González Pérez dejó claro que este sexenio ha quedado marcado por casos graves de violaciones a los derechos humanos.

"En este sexenio hubo violaciones graves a los derechos humanos. Chalchihuapan, Iguala, Tanhuato, Apatzingán, Tlatlaya y Nochixtlán son algunos de los nombres más representativos que marcaron el sexenio 2012-2018. Sería una señal muy positiva de coherencia, responsabilidad y compromiso con los derechos humanos el que antes de concluir su administración, se dé cumplimiento a las recomendaciones respectivas y se atiendan las propuestas formuladas por este Organismo Nacional".

El Ombudsman aclaró que al denunciar los abusos no hay intención alguna de denostar a las instituciones sin de impedir el legítimo ejercicio de la autoridad. La CNDH, reiteró que no defiende delincuentes ni busca impunidad, pero en lo que va de esta administración aumentaron los feminicidios, asesinatos de periodistas, detenciones arbitrarias, tortura, ejecuciones sumarias o extrajudiciales y desapariciones forzadas, además del horror, impunidad e indiferencia que representan las fosas clandestinas.

González Pérez, dijo que las entidades públicas con el mayor numero de recomendaciones son la Comisión Nacional de Seguridad, la PGR, las Secretarías de Marina y Defensa Nacional, la SEP y el IMSS, mientras que los cinco estados con más denuncias, son Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Tabasco Y san Luis Potosí.

En tanto, Presidente de la República, destacó que su gobierno ha impulsado leyes, contra la tortura, la desaparición forzada y en favor de niñas niños y adolescentes, aunque admitió que no siempre resultan suficientes, pero sostuvo que los derechos humanos cobran cada vez mayor conciencia en la población.

"A pesar de que falta camino por delante, estoy convencido de que avanzamos en la dirección correcta. Hoy, contamos con un elemento a nuestro favor: la existencia de una nueva cultura ciudadana que reconoce a los derechos humanos como una causa que nos une y nos convoca a todos. Juntos, sociedad y Gobierno avanzamos hacia a un México donde impere la ley y se haga justicia para que cada ciudadano ejerza con plenitud sus derechos fundamentales".

Peña Nieto se pronunció por mantener el esfuerzo entre el gobierno, sociedad civil y organismos defensores de derechos humanos para seguir fomentando una cultura de respeto a las garantías individuales.