Con la eliminación de fideicomisos, en Conacyt se ahorraron más de 500 mdp

México

Con la eliminación de 91 fideicomisos que existían en el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) se obtuvieron ahorros hasta por más de 500 millones de pesos, dijo la directora del Consejo, María Elena Álvarez-Buylla Roces.

Al presentar su informe de labores del presente año, la titular del Conacyt señaló que antes del año 2000, este organismo contaba apenas con 18 fideicomisos, durante el sexenio de Vicente Fox crecieron a 68, durante el sexenio de Felipe Calderón a 84 y con Enrique Peña Nieto cifra se elevó a 91 fideicomisos, sin embargo reiteró lo dicho por el presidente de la República, en el sentido de que los apoyos a científicos e investigadores están garantizada y no tienen de qué preocuparse.

“En este caso no va a haber ningún problema y con estos mismos mecanismos que ya teníamos muy bien organizados para el caso de becas de catedráticos, vamos a apoyar los proyectos que tengan esta vinculación hacia el desarrollo científico de frontera, hacia el desarrollo tecnológico y la innovación”, enfatizó la titular del Conacyt.

Álvarez-Buylla destacó también que durante la sesión del Consejo General de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación que tuvo lugar el pasado lunes 14 en presencia del presidente López Obrador, se tomó conocimiento de este informe de labores, pero además se aprobó en lo general el proyecto de iniciativa de Ley General de Humanidades, Ciencias, Tecnologías e Innovación.

“Logramos cristalizar este anteproyecto que ya enfatiza este papel preponderante de las humanidades y pone el desarrollo científico y tecnológico al servicio del hombre y no al servicio de ningún interés que promueve, por ejemplo, las tenco-ciencias corporativas pero no”, enfatizó.

Dejó en claro que en este Gobierno el interés primordial es promover la ciencia pública en favor del bienestar del pueblo de México.

Por otra parte destacó también que se articularon capacidades de otros centros públicos de investigación y universidades para realizar modelos matemáticos que nos permitieron entender la dinámica de SARS-COV-2, y algunos de los cambios en esta dinámica de manera prospectiva.

Además se estableció una red de laboratorios de diagnóstico COVID-19 en colaboración estrecha con la Secretaría de Salud y el INDRE, pero sobre todo al desarrollo de vacunas y la recuperación de la capacidad de autosuficiencia en la producción de vacunas que se tenía en los años 90 y que se ha ido perdiendo en todo el periodo neoliberal que nos antecedió.

“Hemos enfocado esfuerzos en lograr tener también puesto que tenemos las capacidades para ello, solamente hay que articularlas y organizarlas como se hizo en el caso de los ventiladores para producir una vacuna mexicana, dado el desmantelamiento que había en el sistema tecno-científico en nuestro país, sobre todo estatal, pues esto no ha sido posible tenerlo a tiempo para la primera temporada, en la cual, ya afortunadamente y gracias a decisiones muy acertadas de parte del gobierno de México tenemos el acceso a vacunas que las que se han ido desarrollando con mayor eficacia”, presumió la directora general del Conacyt.