Aprueban representantes de EU rescate para industria automotriz

Washington, diciembre 10, 2008.- La Cámara de Representantes aprobó una legislación para agilizar préstamos de emergencia por 14.000 millones de dólares a la industria automotriz, pero el rescate aún está en riesgo debido a la fuerte oposición de los senadores republicanos

La legislación, aprobada por 237 votos a favor y 170 en contra, proporcionaría dinero en cuestión de días a las empresas General Motors Corp. y Chrysler LLC. La Ford Motor Co., que ha dicho que tiene suficiente efectivo para mantenerse a flote, también podría recibir ayuda si así lo desea

Los republicanos estaban preparando una fuerte resistencia en el Senado al plan de ayuda, en una rebelión abierta al presidente George W. Bush, miembro de su partido. Desean obligar a las empresas a declararse en bancarrota, u obtener amplias concesiones de las automotrices y sus acreedores como una condición para cualquier esquema de ayuda federal

Asimismo, se oponen a un mandato ambiental que los demócratas insistieron en incluir en la medida

La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijo que el plan representa "amor con dureza" para las empresas y "una oportunidad, una oportunidad más, a esta gran industria"

La Casa Blanca, que lucha para lograr apoyo para el plan entre los republicanos del Congreso, dijo previamente que la bancarrota de las empresas sería un golpe mortal a la industria, con un impacto devastador en las empresas, familias y economías

"Consideramos que la legislación desarrollada en días recientes es un enfoque efectivo y responsable para tratar con las automotrices en problemas y asegurarnos de que se realiza su necesaria reestructuración", dijo Dana Perino, secretaria de prensa de la Casa Blanca

Sin embargo, la medida enfrenta problemas en el Senado, donde necesita al menos de 60 votos a favor. Los republicanos más conservadores en la cámara alta rechazaron el plan durante un almuerzo a puerta cerrada con el jefe de personal de la Casa Blanca, Josh Bolten, quien fue enviado al Capitolio a defender el plan

"La gente se da cuenta de que esta es una iniciativa de ley increíblemente débil, el producto de un gobierno que quiere dejarla en el camino para que sea el problema de alguien más", dijo el senador republicano Bob Corker. "Creo que tiene lo mínimo, muy poco apoyo entre nuestro grupo de legisladores"

Además de proporcionarle dinero en efectivo a las empresas automotrices, crearía una autoridad especial, un "zar automovilístico", que sería nombrado por Bush para proporcionar los fondos, y tendría la capacidad de forzar a las empresas a declararse en bancarrota si no llegan a acuerdos rápidos con los sindicatos, acreedores y otros, para reestructurarse y ser viables

Tras bambalinas, los líderes demócratas y republicanos del Senado lucharon por lograr un acuerdo que permitiría la votación sobre el plan el jueves. Algunos senadores republicanos exigieron que se votara sobre una alternativa que le ordenaría a las automotrices el emprender acciones específicas para reestructurarse, entre ellas fuertes recortes salariales y reestructuración de deudas, a cambio de los fondos federales

La situación recuerda la tensa atmósfera de principios de octubre en la legislatura, cuando sus miembros discutieron ampliamente entre sí antes de aprobar finalmente el plan de rescate para Wall Street, por 700.000 millones, que Bush firmó para convertirlo en ley

La oposición no se limita sólo a los republicanos

El senador demócrata Max Baucus anunció que está en contra de la medida porque tiene un apartado que se refiere al rescate de las agencias estatales de transporte. Los sistemas de autobuses y trenes podrían enfrentar miles de millones de dólares en pagos de deudas, debido a que los negocios exóticos en los que han participado junto con inversionistas han salido mal