CON GABRIELA WARKENTIN, JAVIER RISCO Y SOPITAS. SOPITAS: Condusef, advierte sobre la circulación de monedas falsas

Ciudad de México

Tu ex falsificó su amor y ahora el hampa, no solo se conforma con adulterar billetes, sino que la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, Condusef, ha advertido sobre la circulación de monedas falsas en todo el país, al tiempo que lanzó una guía muy completa para que los ciudadanos puedan distinguir las falsas de las verdaderas y en el caso de recibir una, puedan decir: No lo sé, Rick….

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Si se preguntan cuál es el problema, tal vez valga la pena recordar que, en caso de recibir una moneda falsa y pagar con ella en algún establecimiento, estaríamos incurriendo en un delito grave aún sin saberlo, y al igual que en el caso de los billetes apócrifos, su fabricación, venta y distribución, son castigados por ley con una condena de hasta por 12 años en prisión.

Así que pongan atención porque de acuerdo a la CONDUSEF por más que le echen ganitas, las monedas falsas nunca pasarán por la prueba del tacto y la vista si prestamos atención. Para empezar, una moneda nunca debe de sentirse resbalosa o pegajosa y mucho menos áspera o con bordes, picos o excedentes de metal en ninguna de sus caras.

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Las monedas emitidas por el Banco de México, tienen el valor de la moneda, así como el escudo nacional en relieve, que puede ser palpable y bien definido sobre las figuras de la moneda, en caso contrario, se trata de una imitación. Además, en el caso de las bimetálicas, aquellas que tienen el anillo de acero inoxidable en el borde y bronce aluminio en el centro, como son las monedas de un peso, no debe sentirse la comisura que hay entre el centro y el borde, ni tampoco debe haber excedentes de pegamento o huellas de que fueron fundidas.

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Mientras que en el caso de las monedas de 10 pesos, la Conducef explica que deben sentirse las estrías en los bordes, en tanto que las monedas de 10, 20 o 50 centavos, que son en su totalidad plateadas y hechas de acero inoxidable, el borde se debe de sentir totalmente liso y no debe de haber rebabas, y de ser así, sin duda se tratará de una moneda falsa.

Por su fuera poco, las monedas emitidas por Banxico, son elaboradas con metales, por lo que nunca cambiarán de color ni se oxidarán, por lo que en caso de que hayas recibido una moneda tornasol o con tintes de fierro, o si varía en el peso, diámetro o espesor, sentimos decirte que te dieron gato por liebre.

Por último, pero no menos importante, tanto la Condusef, como Banxico, advierten que por más antiguas que sean las monedas, su desgaste nunca será homogéneo, regularmente, tienden a desgastarse de forma natural e irregular, pero en caso de recibir una moneda que se aprecie lijada o con un desgaste parejo en alguna de sus caras, sin duda se tratará de una falsificación. En el peor de los escenarios, si recibimos alguna moneda falsificada, con todo el dolor de nuestro corazón por haber sido timados, deberemos entregarla a un banco, para su debida destrucción.