Denuncian presiones para apoyar marcha a favor de Mario Marín
Trabajadores del gobierno estatal, del ayuntamiento y transportistas denunciaron presiones para asistir a una marcha a favor del gobernador Mario Marín Torres, pues de lo contrario perderían sus trabajos.
Puebla, México, 17 de febrero, 2006.- Trabajadores del gobierno estatal, del ayuntamiento y transportistas denunciaron presiones para asistir a una marcha a favor del gobernador Mario Marín Torres, pues de lo contrario perderían sus trabajos.
A las 16:00 horas de este viernes habrá una manifestación para protestar los cuestionamientos contra el Ejecutivo estatal, propiciados por las grabaciones en las que negocia con el textilero Kamel Nacif la aprehensión de la periodista Lydia Cacho Ribeiro.
Miguel Malacara Dávila, uno de los organizadores de la marcha, consideró que el mandatario es inocente y víctima de una campaña de desprestigio, por lo que pidió a los poblanos sumarse al movimiento del Paseo Bravo al zócalo de esa ciudad.
Sin embargo, trabajadores del estado y del ayuntamiento, quienes por temor a represalias omitieron sus nombres, indicaron que la asistencia obligatoria a la manifestación es muy parecida a lo que hace Hugo Chávez, presidente de Venezuela.
A través de diversos medios electrónicos locales, los empleados consideraron injusto que se les fuerce a ir a una movilización con la que no están de acuerdo y que fue organizada por altos mandos del gobierno, para quedar bien con el mandatario.
Un trabajador de la Secretaría de Finanzas y Administración (SFA), quien pidió el anonimato, señaló a la agencia Notimex que en sus oficinas les informaron de la "petición", con la advertencia de sufrir problemas laborales si no asisten.
Además se les preciso que deberían acudir después de su horario de trabajo, que al inicio de la administración de Marín Torres fue fijado a las 16:00 horas.
Sin embargo, algunos solicitaron al gobierno municipal y estatal salir antes, pues en lo que se trasladan de sus oficinas al Paseo Bravo no llegarían a tiempo para la marcha, petición que les fue negada.
En tanto, los conductores de combis y taxis denunciaron presiones de sus patrones y autoridades para apoyar a Marín Torres, pues de los contrario perderían su trabajo y sus jefes las concesiones del transporte público.
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