¿Cuál es el origen y significado de las Posadas Navideñas en México?
La celebración de la Navidad incluye una serie de simbolismos y conceptos variados.
El teólogo Maurilio Suárez explicó los orígenes y la simbología detrás de las posadas, una tradición navideña que tiene profundas raíces culturales y religiosas en México en entrevista para En Fin W con Mary Carmen Lara e Iván López Elizondo.
Suárez señaló que las posadas, celebradas del 16 al 24 de diciembre, están ligadas a la preparación para la Navidad, conmemorando el nacimiento de Jesús, la encarnación de Dios hecho hombre. Estas celebraciones comenzaron en 1587, cuando Fray Diego de Soria, un fraile agustino del convento de Acolman, solicitó al Papa Sixto V la autorización para realizar las “Misas de Aguinaldo” como parte de la preparación espiritual para la Navidad. El Papa aprobó la solicitud, y estas celebraciones religiosas se fusionaron con las festividades tradicionales indígenas, que también marcaban el solsticio de invierno.
El teólogo explicó que las posadas consisten en nueve días de celebración, conocidos como un novenario. El número nueve tiene un significado simbólico de totalidad y plenitud dentro de la tradición cristiana. Durante las posadas, se recrea el peregrinaje de José y María buscando alojamiento en Belén antes del nacimiento de Jesús. De esta recreación surge el concepto de los “peregrinos” y “posada” que van pidiendo alojamiento cada noche.
Maurilio Suárez destacó que las posadas son una tradición exclusiva de México, sin equivalente en otros países. A diferencia de otras regiones, en América Latina, particularmente en México, estas celebraciones incluyen cantos, procesiones, fiestas y elementos distintivos como la piñata.
La tradicional piñata mexicana también tiene una simbología espiritual. Suárez explicó que los siete picos de la piñata representan los siete pecados capitales, cuyos colores llamativos simbolizan las tentaciones del mundo. Al romper la piñata, se utiliza un palo, que representa el Evangelio, mientras que la venda en los ojos simboliza la fe ciega necesaria para vencer el pecado.
Finalmente, el teólogo explicó cómo estas celebraciones combinan elementos de las fiestas prehispánicas, como el solsticio de invierno, con el significado cristiano de la Navidad, creando una tradición única que sigue siendo una parte fundamental de la identidad cultural mexicana.