Lentas, investigaciones por muerte de José Antonio

Por Socorro HernándezMéxico.- El 10 de octubre del 2012, agentes de la patrulla fronteriza le dispararon al joven José Antonio Elena Rodríguez de 16 años de edad en Nogales, Sonora, presuntamente porque el adolescente les lanzaba piedras, en el incidente murió el menor

Y a seis meses de lo ocurrido las investigaciones por parte de las autoridades de México y Estados Unidos son lentas, pues aún no se sabe los nombres de los policías que le dispararon al adolescente, así lo dio a conocer en entrevista para W Radio la Señora Taide Elena, abuela de José Antonio

“Porque en la rueda de prensa del día 10 de abril ese día estuvo el testigo ahí y el testigo declaró en rueda de prensa lo que él vio entonces de ese momento acá , es cuando han estado contestando las autoridades mexicanas, estaban herméticas , hasta ahorita no sabemos todavía los nombres de esas personas que es lo que nosotros pedimos, el video de la noche en la que lo mataron"

De acuerdo con las pruebas de balística de campo, se logró comprobar que de lado de Nogales, se localizaron 14 cartuchos percutidos. El informe de la autopsia del menor, difundido por las autoridades Sonora, e menor recibió un disparo en la cabeza, el que lo mato, los demás en el tórax

Es la voz de la abuela Taide Elena:“A mi nieto le dieron 13 balazos, el primero se los dieron en la cabeza con eso lo mataron, ya estando en el piso le siguieron tirando, si usted viera los balazos que están impactados en la pared, usted se daría cuenta que tan abajo tiraron me entiende, hasta cuando él estaba tendido”

La Patrulla Fronteriza informó a través de un comunicado, que sus agentes disparó contra un grupo de sospechosos que les lanzaban piedras, luego de advertirles que no lo hicieran, sin embargo las pruebas que les hicieron a José Antonio, así como un testigo dicen lo contrario:"Estados Unidos le va buscar un delito al niño porque se va a defender porque el nuño era un niño limpio, el salió completamente limpio de drogas en todas en todas la pruebas que se le hicieron el no traía una piedra en su mano, ahí donde lo mataron no había pruebas. La necropsia esa dice claramente que la persona estaba corriendo ni estaba parado, simplemente iba caminando"

La abuela Taide Elena lamenta agentes de la patrulla fronteriza hayan terminado con los sueños de un adolescente, tan alegre, tan tranquilo, y quien deseaba convertirse en soldado, por ello continuarán con acciones para que su muerte no quede impune